Un equipo médico realizó el exitoso transplante con el órgano de una donante fallecida. Los expertos ahora esperan que la cirugía permita llevar adelante un embarazo.
Derya Sert, internada en un hospital cerca de Antalya, al sur de Turquía, es la primera mujer en el mundo que recibió un trasplante de útero de una donante fallecida.
La operación podría dar esperanzas a millones de mujeres en el planeta que no pueden tener hijos.
Los médicos del hospital universitario Akdeniz efectuaron con éxito este trasplante el 9 de agosto a una mujer de 21 años que nació sin útero, al igual que aproximadamente una de cada 5 mil mujeres en el mundo.
"Si Dios lo quiere, pronto tendremos a nuestro bebé en los brazos", explicó Sert, quien se encuentra hospitalizada desde hace seis meses.
Se trata del segundo trasplante de útero en el mundo, después de un primer intento en Arabia Saudita realizado en 2000. Esa intervención se hizo a partir de una donante viva, pero fracasó después de 99 días. Los médicos tuvieron que retirar el injerto.
El cirujano Omer Ozkan trabajó con un equipo de ocho médicos y otros siete especialistas durante la cirugía.
Pese al buen resultado de la operación, los especialistas se muestran prudentes. "La operación se desarrolló bien. Pero podremos hablar de éxito cuando ella tenga su bebé", declaró Ozkan. "Por el momento, estamos satisfechos de constatar que el tejido está vivo y que no hay rechazo", agregó.
Ahora deben esperar al menos seis meses antes de confiar la paciente a los médicos que implantarán embriones pertenecientes a la joven y su marido.