Rebelarse contra el tirano

Un gobierno que ha tocado fondo en los indices de popularidad, si además pierde unas elecciones que son la antesala de las generales y que se presentan como unas primarias, lo primero que deberia hacer es convocar elecciones generales ya, pues estariamos hablando de un gobierno que ha perdido legitimidad, y la legitimidad es a la democrácia lo que la legalidad al Estado de Derecho.

Lo que ocurre es que aqui las teorias de la democracia no funcionan porque estamos ante un regimen corrupto, no democrático, que no sigue los pasos que cualquier gobierno democratico seguiría y donde la transparencia brilla por su ausencia.

Dudo mucho que estos dejen huellas de su paso por el gobierno. La impresión es que no dejarán ni rastro ni papeles que les puedan comprometer. Es más, lo único que encontrarán los nuevos inquilinos de los ministerios será aire, como siempre que abandonan el poder los socialistas, como si hubiera
pasado una plaga o un huracán que todo lo destruye.

¿Y que ocurre con el movimiento 15-M o Democracia Real? Creo que es un movimiento espontaneo al que no han dudado en instrumentalizar los partidos de izquierda, dada cuenta que se resisten a perder el monopólio de la calle. La izquierda no concibe que la calle sea usurpada por ciudadanos normales y ya
hemos podido ver a Willys Toledos infiltrandose y tratando de protagonizar la rebelión civica. El rédito que pueden sacar creo que esta vez será nulo, en primer lugar porque son contra ellos contra quienes se levanta la protesta, principalmente, aunque tambien contra el PP porque forman parte del regimen corrupto en que se ha convertido esta pseudodemocrácia formal, pero, sobre todo, porque han cometido el gravisimo error de dividir a la sociedad en casta politica y ciudadanos, los primeros privilegiados e inmunes ante cualquier crisis, mientras que los segundos han sido las verdaderas victimas de la pésima gestión de los politicos y la delictiva actuación de los financieros. NO han dado soluciones, pero tampoco han aprendido la lección que cualquier crisis nos aporta. Las cosas siguen igual, de vuelta a las andadas: sigue habiendo despilfarro, corrupción politica, privilegios, enchufismo familiar, nepotismo y en
definitiva una TIRANIA bastarda que el primer dia cometió la torpeza de sembrar el terror entre unos jovenes que acampaban pacificamente en las calles con toda la rabia contenida por la indignaciòn de lo que está aconteciendo.

Espero que esto no pare, que sea el principio de una revolución que acabe de una vez por todas con esta gentuza que aún pretende tomar a los ciudadanos por gilipollas como hemos podido ver en declaraciones de ministros y otra variopinta representación de la casta, donde todavia tienen la caradura de pedirles el voto. No debe parar porque estos no se iran si no se les echa y se deben ir a su casa sin un duro y al trabajo, el que lo tenga, porque entre otras cosas no han hecho meritos para retirarse con unos privilegios vitalicios, ni siquiera el propio presidente, que no ha estado a la altura.

Hay que recordar que en Japón el primer ministro se eliminó el sueldo tras el desastre de la central nuclear, un problema que no es comparable al que ha creado Zapatero. Hay que ir acostumbrandose a que los politicos están para servir al ciudadano, son prescindibles y deben volver a su vida normal tras su paso por la politica, sin ningún privilegio. Después ha de venir una minuciosa investigación de como
han gobernado estos años, dónde ha ido a parar el dinero de los contribuyentes, cómo llegaron y cómo se van, cómo gestionaron nuestro dinero y el resultado de esa investigación hará que se les procese o no, aunque se trate del presidente del gobierno o el del Tribunal Constitucional, que son ciudadanos igual que yo.

Vayamos aprendiendo de democracias como EEUU, donde el director del FMI está en el talego, al lado del camello de Harlem. Se acabaron los tiempos de la impunidad. Hay que investigar por qué ha ocurrido este desastre que hemos pagado los que simplemente nos hemos dedicado a trabajar y a pagar nuestros impuestos. Y si para eso hay que echarse a la calle y no moverse, se deberá hacer una y mil veces, hasta que se aclaren todos los casos de corrupción politica que han hecho que en España se haya acabado la democracia.

John Locke dijo "Cuando el soberano (Estado) rompe su parte del contrato social con el ciudadano, al cual le debe su autoridad, éste está obligado a rebelarse contra él, pues ya no es el soberano, ahora es el tirano".

Estigma