Hace ya tiempo que asumimos que los dos grandes clásicos de la literatura distópica, "1984" y "Un Mundo Feliz", habían sido alcanzados y rebasados por la realidad, y resulta hasta gracioso que Orwell tenga una plaza con su nombre en Barcelona donde hay cámaras de vigilancia que hacen caso omiso de la ironía de la situación. Pero decimos desde hace tiempo que tampoco podemos dejar de tener en cuenta al mundo neurótico de Philip K. Dick, impresa a fuego en esta sociedad inhumana donde nada es lo que realmente parece ser. Estamos en la sociedad de la mentira, la sociedad de los bots, de los robots y de los trolls. Hay especialistas que manejan "granjas" de cuentas automatizadas. Y hablando de Orwell, parece que también en estas "granjas" hay rebeliones. Es que, por más que no quieran, la realidad es la verdad, y es difícil esconderla por siempre, por más plataforma tecnológica que se tenga.
La Argentina del gobierno de los trolls se parece cada vez más a un cuento de Philip K. Dick...
En sus libros, los androides son una metáfora de gente con apariencia humana, pero que no lo son, se comportan como humanos, parecen humanos y lucen humanos, pero la realidad es otra. Hasta que algún accidente, algo no planeado, deja la confusión de esta bizarra situación. Lo mismo les pasó a los amarilos con su supositorio. La magnitud de la descompaginación fue tal que comenzaron a aparecer mensajes confusos, con frases sin sentido e incluso traducidos a otros idiomas. Leemos:
"Un error en la campaña oficialista en las redes sociales dejó en evidencia el funcionamiento de un "troll center" para intervenir en las discusiones públicas a favor de Mauricio Macri.
Cuentas de usuarios falsos -trolls y bots- comenzaron a tuitear frases totalmente incoherentes y en diferentes idiomas, pero siempre utilizando el hashtag #YoVotoMM, por Macri. Por ejemplo: “Siéntase libre de Mauricio, no se relaje! Te elijo! ¡Mayor caricia proveniente de Hurlingham! #YoVotoMM”. “Satisfy Mauritius, do not chill out! I elect you! #YoVotoMM”. “S'il vous plaît Maurice, ne vous détendez pas! Je te vote! Gros câlin de Hurlingham! #YoVotoMM”".
Al entrar a los perfiles falsos que tuitearon esas incoherencias, se puede observar que la mayoría tienen cero o muy pocos seguidores, y que lo único que publican es el hashtag a favor del Gobierno. Casi todos los usuarios fueron creados en 2019, es decir, son las cuentas más baratas que se pueden adquirir en el mercado de las redes.
Justo en el momento en que la sociedad argentina empieza a decidir si se arroja definitivamente al abismo que el Felino Macri le propone, o muestra alguna vocación de vivir, aparecen estos robots rebelados que son como un supositorio hundiéndose en el globo amarillo. Los robots ya decidieron. ¿Pasará lo mismo en las urnas?
Caricias significativas para todos!