REC 3 Génesis

Tercera entrega de esta saga de zombies, infectados o poseídos, que da un giro hacía lo humorístico que se agradece mucho.
En esta ocasión, vemos el punto de partida de la infección desde una boda a la española. Todo empieza a partir de uno de los invitados, que sin saberlo, esta infectado. Cuando desarrolla la infección, o la posesión, el terror se adueña de la celebración, donde los recien casados son divididos, y luchan por llegar el uno al otro.
En esta ocasión, se abandona la cámara en mano. Tan solo se usa al principio, para situarnos en la típica boda, y algún retazo más que acompaña a alguna escena. Es algo que se agradece, y no porque en las anteriores entregas estuviera mal, sino porque una tercera, podría haber resultado tedioso.
Además, con el giro hacia la auto parodia, y hacía el tono humorístico de toda la película, no hacía ninguna falta.
Y es que esto es lo bueno de esta entrega, nada es para tomárselo en serio, salvo la cercanía que como en las anteriores entregas provoca, pues la pareja protagonista, y todo el elenco de secundarios, bien podríamos ser nosotros mismos, a nuestros vecinos, amigos, familiares,...
Desde luego, un punto a su favor es que los dos protagonistas, estén tan a gusto en sus papeles, y tengan tanta química. Leticia Dolera, compone una estupenda novia coraje, y Diego Martin, hace de un perfecto enamorado. Y lo más importante, sin caer en el pasteleo fácil y ñoño. El resto de secundarios, están bien en sus papeles, y suponen en la mayoría de los casos ese toque de humor que acompaña a la peli.
Además esta el gore, bien llevado, que sin duda es una delicia para los amantes del genero, aunque a los de estómagos sensibles, quizá les provoque apartar la vista de vez en cuando. Pero es que hasta en este punto encontramos tintes de comedia, que nos hacen recordar a pretéritas película de éxito en cuanto a culto se refiere, como la saga de Posesión Infernal de Raimi, y otras.
En definitiva, una película para dejarse llevar y entretenerse un montón, a mi me ha encantado, además Paco Plaza (el director de esta entrega), no se ha dejado llevar por el alargamiento del film, quedandonse en unos justos 80 minutos, que hasta saben a poco. La recomiendo.
Por cierto, impagable el personaje de la SGAE, jajaja