Has entrado en mi umbral, ya eres mía, a partir de ahora te voy a proteger de tu incipiente naturaleza, de los peligros que te acechan adyacentes de tus entrañas de hembra.
No exhales fuerte no vaya a ser que se despierten por contagio los lechos colindantes de sábanas bien estiradas, sin arrugas almidonadas y blancas sepulcro.
No te muevas, eres el nuevo jarrón que adorna la aséptica estancia por decorar de primaveras marchitas.
Yo te salvo, yo te ayudo, yo te libero de las garras profundas del dragón alado que te rodea apretando tu desnuda cintura.
No tienes porque sentir eso, déjame que te lleve de la mano hacia extensas praderas planas de monitoreoconstante y sin altibajos, donde no suene ningún Do de pecho. Donde no corras ningún riesgo de vivir, vaya ser que te me escapes y grites desnuda a la luna, aulles y se despierten a tu vera todas las durmientes guerreras que me acechan con sus despampanantes pechos desnudos a la luz, brillantes y chorreantes de ganas de manar vida pura.
Siéntate anestesiaday en silencio que así esta todo en su sitio sin palpitar a ningún ritmo nuevo. Vaya ser que se me desate la locura y me dé cuenta de estas cuatro paredes apestadasde morgue y silencio.
Has entrado en mi umbral quédate inmóvil y por favor te lo pido no digas nada....
Recién parido después de llegar de un nuevo parto robado y rodeado de miedo
por:Inmaculada romero