Recomendaciones para mejorar la digestión durante la ruta en bici

Algunas personas tienen problemas con la digestión cuando van en bicicleta, es un poco complicado llegar a la causa que origina este problema, pero sí hay una serie de consejos para prevenir este malestar.

Para determinar con exactitud el porqué de esta complicación hace falta profundizar un poco más, de manera que las recomendaciones sean las acertadas. En el caso de que la molestia sea aguda y constante lo más lógico es acudir al médico.

Algunos de los siguientes consejos pueden ser la clave para la mejoría a esta dolencia y así mejorar la calidad de vida y manejar la ruta en bici de forma confortable y divertida.

Consejos para mejorar la digestión durante la ruta en bici

Esta es una de las recomendaciones que con mayor frecuencia se realiza para tener un mejor rendimiento sobre la bici, dejando atrás algún malestar digestivo que pueda entorpecer la ruta.

Se trata de que haya un tiempo de diferencia entre la hora de la comida, bien sea desayuno, almuerzo o merienda con respecto a la hora del entrenamiento.

El tiempo se puede acortar si la intensidad es menor cuando se comienza la ruta y la comida es ligera.

Cuando la salida es muy fuerte y el desayuno no es el más apropiado o es muy pesado, es de esperarse que durante el camino aparezcan los problemas digestivos, disminuyendo la efectividad del ciclista.

Cuidado con la fibra y las harinas

El día anterior se debe disminuir o evitar los alimentos que tengan gran cantidad de fibra, de igual manera el día del entrenamiento.

A pesar de que la fibra está recomendada para mejorar el tracto digestivo y evitar el estreñimiento, no es lo más aconsejable a la hora de hacer una actividad física que implique mucho esfuerzo, puesto que disminuye la capacidad digestiva provocando gases.

Se debe evitar las harinas integrales, frutas y verduras ricas en fibras, es aconsejable ingerir pan blanco, arroz o pasta.

En las horas previas al entrenamiento es bueno evitar los lácteos, a pesar de no tener problemas a la intolerancia a la lactosa, es muy probable que los lácteos estén relacionados con problemas gástricos.

Por evitar uno o dos días los lácteos no va a ocurrir nada malo al organismo, lo que sí sucede es mejorar la actividad física a través de una rutina sin inconvenientes.

En el caso que sea imposible o casi imposible dejar de consumir lácteos, es bueno hacerlo con productos libre de lactosa.

Otro consejo es no comer alimentos con fructosa de forma aislada. La fructosa es la azúcar que se encuentra en la fruta y en algunas bebidas.

En realidad no debería ser causa de problemas digestivos al ser combinada con otros tipos de azúcares, aunque si se hace de forma aislada y en grandes cantidades, si puede ser causante de problemas en el tracto intestinal.

Evita la automedicación

Se debe evitar auto medicarse con aspirinas y antiinflamatorios, puesto que aumenta de forma drástica la permeabilidad intestinal, y puede causar serias molestias gástricas y contraindicaciones en casos de patologías que requieran vigilancia estrictamente médica.

Cuidado con el gas

Es de importancia no masticar chicle y evitar el consumo de bebidas cuyo componente sea el carbonato. El chicle genera secreción de saliva lo que relativamente ayuda a reducir los niveles de acidez.

Sin embargo, al masticar esta golosina puede ocurrir que se trague determinada cantidad de aire, una de las causas que origina los odiosos gases.

En cuanto a los refrescos con gas pueden acabar provocando inflamación, hinchazón, malestar y dolores en diferentes partes del abdomen.

En el caso que el organismo tenga predisposición a determinadas bebidas o alimentos, es decir que sea sensible a elementos que ya conoce, se debe tratar de evitarlos.

Tampoco es aconsejable el café, ya que puede ser causante de diarreas, lo que conlleva a la deshidratación, empeorando la situación del ciclista.

Tomar todas estas precauciones ayuda a mejorar la actividad del tracto digestivo, además de mejorar la actividad física a través del ciclismo.