Por Mabel Salinas
Todos, en alguna ocasión, hemos tenido malos pensamientos; eso es parte de la naturaleza y de la forma en que nuestro cerebro funciona. Sin embargo, cuando este tipo de ideas son muy frecuentes pueden afectar nuestra vida laboral y personal. Por algo dice el dicho que "no hay peor enemigo que uno mismo". Así como una actitud positiva puede llevarnos a cumplir metas, una negativa puede autodestruirnos.
¿Qué hacer si se tiene un mal pensamiento, entonces? La primera opción usualmente es hacer a un lado el pensamiento, ignorarlo como si nunca hubiera ocurrido. No obstante, la psicóloga Shannon Kolakowski, autora del libro Why Depression Hurts your Relationship? , considera que no debemos temerlos.
Ella propugna que cuando se piensa en cosas como "Voy a estar solo(a) para siempre" o "No soy lo suficientemente bueno(a) para escalar en la empresa", no se deben reprimir estas ideas o evitarlas, porque eso fomenta que se vuelvan más fuertes o convincentes, pues se les teme demasiado, es como si se huyera de una terrible verdad.
Lo mejor que se puede hacer es reconfigurar la relación que se tiene con los pensamientos por medio de la Terapia de Aceptación y Compromiso ( Acceptance and Commitment Therapy, ACT, por sus siglas en inglés). ¿Y a qué se refiere? A que se tienen que fragmentar los pensamientos para reconocerlos, pero a la vez hay que explorarlos y analizarlos para finalmente tener control sobre ellos.
"Difusión es el proceso de notar un pensamiento negativo o ansioso y responder a él con apertura y curiosidad, como si se fuera un observador distante", explicó Kolakowski a Forbes. "En lugar de aceptarlo como si fuera la verdad absoluta, reconoces que los pensamientos vendrán y se irán, pero no tienes que creerlos o actuar con base en ellos".
Más bien la psicóloga propone que se les fragmente y analice. Cuando se tenga un pensamiento como "No soy lo suficientemente bueno para este trabajo" hay que buscar la causa de la idea. Tal vez es porque otro compañero recibió un aumento o un ascenso. Pero hay que estar consciente que eso no tiene nada que ver con uno. Tal vez esa persona solamente tenía más tiempo en la compañía o mayor experiencia. Entonces hay que pensar que cuando se tenga mayor noción de la empresa los asensos o aumentos también podrían ser para nosotros.
El reconocimiento de nosotros mismos puede incluir algo de negatividad. Lo importante no es deshacernos de ella, sino cambiar la manera en que reaccionamos hacia su existencia. "Crear una nueva relación con nuestros pensamientos es liberadora. No puedes controlar qué pensamientos llegan a tu mente, pero sí la manera en que respondes a ellos y así puedes controlar las acciones que tomas".
En el caso del trabajo, puedes optar por llegar a tiempo, enfocarte en tu productividad, ser más propositivo y creativo, lo cual seguramente te llevará al lugar en el que quieres estar (el aumento o el ascenso) en lugar de hacerte sentir poco valioso. Todo está en la actitud. Así que la próxima vez que se tenga un pensamiento negativo, ya sabes cómo combatirlo para eventualmente revertirlo.
Fuente: https://emprendedor.com/reconfigura-tu-cerebro-para-no-temer-a-los-malos-pensamientos/