Un solo discurso, el del Gobierno, con críticas a los ‘’agoreros’’ y que transparentó el difícil momento que vive la actividad minera. Notorias ausencias, como la del gobernador Gioja y los intendentes de los departamentos que tienen proyectos en explotación. Y una perlita, la salida ‘’presurosa’’ del Nº1 de Barrick en Argentina, Guillermo Caló, para esquivar el diálogo con la prensa y así evitar referirse a la crítica situación que vive la minera. Este combo de hechos marcaron el acto oficial por el Día de la Minería, que como de costumbre se hizo en la Casa Natal de Sarmiento y donde esta vez no se escucharon voces eufóricas.