El nuevo primer ministro australiano, Kevin Rudd, formó su Gobierno la semana pasada con una cifra récord de mujeres, sólo cinco días después de arrebatar el liderazgo del partido laborista aJulia Gillard, quien ejerció su mandato desde 2010 siendo la primera mujer en la historia al frente del Gobierno de Australia.
"Estoy complacido de que nuestro Gabinete tenga el mayor número de mujeres en la historia australiana", destacó el nuevo primer ministro el pasado día 1 de julio al anunciar los nombres del Ejecutivo en el que estarán presentes once mujeres, de las que seis son caras nuevas. "Es gente respetada no sólo por sus colegas parlamentarios, sino por los sectores de la comunidad de los que provienen", añadió el mandatario.
Rudd ha llegado al frente del Ejecutivo de Australia tras un conflicto en el liderazgo del partido laborista que le permitió desbancar en un votación interna a la primera y única mujer que ha dirigido el Gobierno australiano Julia Gillard."Yo soy una persona que cree en el mérito. Cuando nos encontramos con una persona de mérito, bien sea mujer u hombre, debe ser promocionado", apuntóRudd, quien ganó la votación de los legisladores laboristas por 57 votos frente a los 47 que obtuvoGillard. El primer ministro explicó que el nuevo Gobierno australiano intentará diversificar la economía, dar un impulso a la productividad y el área manufacturera y coordinar con empresarios y sindicatos para asegurar los empleos, el nivel de vida y el crecimiento. La juramentación de cargos del pasado lunes se celebra apenas tres meses antes de las próximas elecciones generales en el país.
Rudd ha llegado al frente del Ejecutivo de Australia tras un conflicto en el liderazgo del partido laborista que le permitió desbancar en un votación interna a la primera y única mujer que ha dirigido el Gobierno australiano: Julia Gillard. Precisamente, en 2010, fue Gillard la que asumió la Jefatura del Gobierno tras una repentina dimisión de Rudd, entonces 'premier', que no logró superar una revuelta de los sindicatos y varios sectores de su partido.
Desde su llegada al poder en 2010, la ya exprimera ministra ha tenido que enfrentar no sólo a la oposición australiana, sino que también resistió dos intentos de sustituirla y el sexismo de parte de la sociedad australiana que ha salpicado su carrera de política de episodios en los que se ha puesto en duda su valía por el hecho de ser mujer.
El nuevo gobierno australiano. Foto: EFE.
Fuente: Mujeres&Cia
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