España batió el pasado año su propio récord en trasplantes y donantes, con cifras que alcanzaron máximos históricos. En total se realizaron 4.212 transplantes, 500 más que en el 2010 y se registraron 1.667 donantes, 167 más que el año anterior.
Los transplantes renales (2.494), hepáticos (1.137) y de páncreas (111) siguieron siendo los más numerosos y durante el 2010 batieron sus propios records. En referencia a los primeros, los transplantes renales, destacar sobretodo, su importante incremento, un 12%, favorecido muy directamente por un 30% de crecimiento en el número de donaciones de riñones por parte de personas vivas, una modalidad que según el director de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), Rafael Matesanz, ”ha arraigado bien en España. El año pasado se realizaron 312 trasplantes con esta modalidad”.
Por contra, los transplantes de corazón (237) y de pulmón (230) se han mantenido practicamente en las mismas cifras que el 2010 y es que según explicó Matesanz durante su aparición ante los medios de comunicación acompañado por la ministra de Sanidad, Ana Mato, ”el donante español va teniendo un proceso de envejecimiento progresivo, que se traduce en que sean órganos más difíciles de conseguir”.
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