Los investigadores analizaron la reacción de 400 personas a la implantación de falsos recuerdos, tales como la historia de un viaje en globo aerostático en la infancia, una broma a un profesor en la escuela o un altercado en una fiesta familiar. Sorprendentemente, tras ser expuestos a la narración sostenida de un hecho ficcional, un 30% de los participantes recordó el suceso como si fuera real, y otro 23% afirmó creer parcialmente la veracidad del mismo.
La investigación podría echar luz sobre aspectos inexplorados de la percepción humana. La construcción de la memoria es un fenómeno complejo, donde se conjugan factores emocionales, cognitivos y ambientales. Los especialistas creen que estudios como este no solo permiten comprender mejor la psique, sino que son de gran utilidad en procesos terapéuticos e incluso judiciales.

