Recordatorio y crítica

Os recuerdo que hay en marcha un proyecto para donar aunque sea un solo libro a bibliotecas para pacientes (hospitales), ya que por la crisis llevan un par de años con partidas más que exigüas y no pueden hacerse con más libros.
Más información pinchando en la imagen.
Y ahora, la crítica por la cual much@s me criticarán, me quemarán en la hoguera y me vetarán a mí, al blog y mi trabajo por aquí en sus dominios, pero es lo que hay. Es lo que pienso y lo diré por mucho que joda a más o menos gente.
Esta crítica viene por este mismo proyecto, el de donar libros a pacientes, que aunque sabía que la participación sería limitada porque el blog tiene los seguidores que tiene, no pensé que pudiese ser tan baja. Sinceramente creí que por parte de las editoriales sería un fracaso total, que me vendrían con la cantinela de 'estamos en crisis y con los libros que enviamos a blogs no podemos permitirnos el enviar libros aunque sea una causa solidaria'. Pero no, la verdad es que me han sorprendido muy gratamente. Obviamente no todas las editoriales han contestado y todas las que contestaron no me dijeron que sí, pero la gran  mayoría han accedido dando un buen lote de libros.
La 'gente de a pie', es decir, la gente normal sin blogs literarios que se compra los libros como buenamente puede sí que se va apuntando. Poco a poco, pero lo hacen. ¿Y entonces el problema? El problema, y ahora ya podéis prender la antorcha, viene que, ilusa de mí, pensaba que aquell@s que más podrían donar por tener más libros (lo cual hace que se tenga más probabilidades de que haya alguno que no guste), más donarían.
¡Ja! Aquí todo el mundo se llena la boca de vez en cuando diciendo que los que más tienen (dinero), deberían poner más de su parte para salir de la crisis; pero claro, como ahora no hablamos de dinero y sí de libros, algo que nosotros tenemos, ya no abrimos la boca, ¿eh? Ya no decimos que el que más tiene debería ayudar al resto. Claro, no es lo mismo el date que el tomate.
Y sí, como much@s habrán adivinado estoy hablando de blogs literarios. Muchísimos blogs son los que reciben a la semana varios libros y que al final de mes tienen unos IMM interminables interminables, otros no reciben tantos y los hay que porque no pueden o no quieren no los reciben. ¿De verdad queréis hacerme creer que de entre todos los libros que os llegan no ha habido ni uno solo que no os haya gustado o que no vayáis a leer otra vez y que por lo tanto podáis donar? Gente, eso no os lo creeis ni vosotros, así de claro.
Tengo 27 tacos y tengo lo que vulgarmente se le llama 'pelo en las pelotas' pero en versión femenina. Por favor, ahorraos la energía, saliva y tiempo de intentar convencerme de lo contrario. Si aquí muchos de vosotros llegáis cuando reseño alguna novedad que cae en mis manos o escribo alguna entrada crítica, también os llegó la entrada donde anunciaba este proyecto, simplemente no os salió de los ovarios o huevos el participar porque se os da muy bien llenaros la boca con palabras bonitas, con críticas (cuando son otros los que deben dar) o palabras de solidaridad cuando a algún blogger le pasa algo injusto, pero no tenéis los cojones de ayudar al prójimo si para ello tenéis que renunciar a algo vuestro.
Sabía que la bloggosfera estaba jodida por tantas cosas que se leen, pero lo que no sabía era que estaba tan profundamente podrida.
Os juntáis cuando alguien copia una reseña o diseño de alguien (que sí, que está mal y debe hacerse saber), pero juntarse para dejar de tener uno o dos libros en las estanterías... Eso no porque entonces queda fatal en las fotos y vídeos donde enseño mi super-mega biblioteca particular. Además, ¿¡qué libros tendría para sortear y así ganar más seguidores?! No por dios, eso no, eso sería lo último (nótese la ironía). Pues muy bien gente. Luego vais a twitter y facebook y ponéis frases con todo el sentimiento del mundo sobre solidaridad, sobre que las cosas deben cambiar, sobre los buenos que sois, porque está claro que todo queda ahí, en la boca cuando lo decís y en los dedos cuando lo escribís, porque hacer, lo que se hacer... La acción brilla por su ausencia.
Y para terminar os diré tres cosas:

1) Todo esto va para la gente que lo vio, que se cree algo así como María de Calcuta, que por las redes sociales se encumbra y cuando realmente puede hacer algo que está en sus manos, no lo hace. Si te das por aludid@, problema tuyo. Por ende, la gente que no se enteró no se tiene que dar por aludida.
2) Sí, esto es totalmente voluntario y por lo tanto, por mucho que se tenga, no es obligatorio participar. Totalmente cierto. Pero eso no quita que me reviente ver cómo la gente se queja de todo, de lo mal que van las cosas, de lo que haría falta para solucionar las cosas, y cuando realmente hay algo en lo que pueden ayudar solo se escuchan los grillos porque salen espantados. Mejor me guardo el adjetivo que me viene a la cabeza...
3) Ahora no quiero palabras bonitas ni que nadie me baile el agua. No quiero que nadie se apunte para decir 'me he apuntado, que buen@ soy' y quedar como dios porque todos sabemos cómo acabaría la cosa... A la hora de la verdad, de decir qué libros donaría, la gente desaparecería y no daría señales de vida.

En fin, me da esta entrada es algo así como mi sentencia de muerte, pero me la suda.
PD: En este blog no se permiten los comentarios anónimos desde hace casi un año. Lo digo por si a alguien se le pasa la idea por la cabeza, pero tranquilidad, siempre quedará hacerse en un momentito una cuenta nueva.