Un trabajo inspirado puede convertirse en una campaña de publicidad. A veces una idea que ni siquiera surge ante la petición de un cliente, sino que se desarrolla a otro nivel y después encaja perfectamente en los requerimientos creativos.
Rick Mereki, Tim White y Andrew Lees dieron en el clavo el año pasado, con un proyecto encargado por STA Travel, en Australia. La campaña, ‘Move, eat, learn’, acabó siendo integrada por tres cortos de un minuto aproximadamente en los que estos viajeros de corte publicitario, nos invitaban a recorrer el mundo, de una manera diferente y espectacular.
Nos quedamos con el clip de MOVE, ’1 minute, 1 man, 1 epic journey’, que sin duda es lo mejor de la campaña, con un recorrido por 200 emplazamientos variopintos y sorprendentes, que nos provocan una irremediable necesidad de meterse en un aeropuerto y coger el primer avión que salga de la maldita ciudad en la que nos encontremos.
Desde Bangkok hasta Buenos Aires, pasando por Sidney o Cuzco. Por si buscáis lo hispánico, deciros que la única ciudad española que sale en el vídeo es Barcelona. Desde luego merece la pena recuperar esta campaña que ahora se ha puesto nuevamente de moda para los que no vivimos en Australia, aunque hace casi un año que se presentó, cuando más de 3 millones de personas la vieron en los primeros días de su presentación. Todo un éxito de marketing viral, para que algunos vayan aprendiendo.