Elizabeth Bennet es mi heroína literaria favorita.
Sé que es probablemente la elección más cliché para una heroína literaria favorita, pero en mi (siempre tan) humilde opinión, Jane Austen creó el sueño de un lector cuando escribió a Elizabeth en las páginas de Pride and Prejudice (Orgullo y Prejuicio).
Elizabeth es brillante e inteligente. Ella se mantiene firme en una sociedad donde se espera que las mujeres se desvanezcan y ella no tiene miedo de llamar a la gente por lo que es. Ella sabe que rara vez es la mujer más hermosa o talentosa de una habitación, pero no deja que ese hecho la haga sentir insegura o avergonzada.
En resumen, Elizabeth Bennet es la definición misma de una mujer fuerte e independiente ¿Y mencioné que es también la reina del descaro? ¡Pues con eso me tiene!
Entonces, ¿por qué estoy enamorada de la señorita Elizabeth Bennet? Porque hoy estoy hablando como tú, como el autor de su propia novela que puede elegir a un personaje principal que va a hacer tambalear el mundo de sus lectores, y no hay mejor ejemplo para usar a lo largo de nuestro post de hoy, que la mitad perfecta de Mr. Darcy.
Así que sin más preámbulos, comencemos nuestro desglose de un personaje principal.
Algunas cosas a tener en cuenta antes de empezar a bucear...
Primero lo primero, permítanme hacer un prefacio a este post con algunas notas rápidas sobre los personajes principales:
A) Tu personaje principal no tiene que ser quien predomine con el punto de vista. El héroe de una historia obtiene generalmente el Punto de Vista, pero éste no es siempre el caso. En el gran Gatsby, Jay Gatsby es el personaje principal, pero su historia se cuenta a través de la perspectiva de Nick Carraway.
Esto sucede a menudo en El Señor de los Anillos también, cuando la historia de Frodo se cuenta a través de la perspectiva de su mejor amigo Sam Gamgee, aunque voy a señalar que muchos consideran a Sam el verdadero héroe de la historia.
B) Puedes tener más de un personaje principal en una novela. Esto puede parecer obvio al principio, pero lo que realmente estoy tratando de decir es que puedes tener más de un personaje principal en una novela sin tener que hacer que todos los personajes manejen un punto de vista de la historia.
Volviendo a nuestro ejemplo de Orgullo y Prejuicio, fácilmente podría argumentar que el Sr. Darcy es un personaje principal a pesar de que nunca actúa como un personaje con punto de vista. Darcy está presente para la mayoría de la historia y sus acciones afectan profundamente la trama. Al final del día, eso es bastante bueno como material de un personaje principal .
C) Tu PP puede ser estático o dinámico. La mayoría de los argumentos basados en personajes presentan personajes dinámicos, lo que significa que los personajes evolucionan emocionalmente y/o espiritualmente a lo largo de la historia. Lo contrario de esto son las tramas impulsadas por la acción. El PP no cambia en absoluto durante el curso de la acción, haciéndolos un personaje estático.
Si bien es cierto que la mayoría de las novelas están dirigidas por los personajes y presentan PP dinámicos, no siempre tiene que ser el caso. Muchas historias de aventuras, thrillers de espías, y policíacas cuentan con personajes cuyas personalidades y emociones sólo se mueven un poco a lo largo de la historia. ¡Y eso está bien!
Ciertamente funcionó bien para Indiana Jones y James Bond. Así que puede funcionar en nuestros personajes principales.
Vale, hemos aclarado un par de puntos y ahora sí. pasemos a lo mejor.
Entonces, ¿qué hace grande a un personaje?
Un personaje principal puede convertirse en memorable y muy amado para cualquier número lectores y por razones diferentes, pero al final del día, hay dos factores principales que deben estar presentes si un personaje principal quiere robarse el espectáculo:
1. Deben ser capaces de soportar el peso de la acción. Un personaje principal debe ser proactivo en perseguir su objetivo en la historia y reactivo al tratar con los asaltos del villano (o la fuente del conflicto, si tu novela no presenta un antagonista)
Ese es un propósito difícil para cumplir, y si tu personaje no está físicamente, mentalmente y emocionalmente capacitado para manejar ese peso, no es el personaje adecuado para dirigir tu historia. Por supuesto, tu personaje puede crecer en su fuerza a medida que evoluciona la historia, pero es necesario convertirse en el que conduce la historia hacia adelante en algún momento, preferiblemente antes de la mitad del camino.
Verás, si tu personaje es simplemente reactivo (como que no está haciendo nada para crear acción), entonces claramente se cuenta la historia de otra persona, y si solo está siendo proactivo (como que creando acción pero nunca enfrentando los conflictos), entonces es probable que resulte en una trama aburrida.
Y ninguno de esos escenarios hacen una historia muy buena, ¿verdad?
2. Ellos deben atraer a los lectores a la historia. Los lectores no recogen novelas para leer sobre el escenario o la historia. Ellos quieren saber sobre el personaje principal, las luchas que están enfrentando, y el viaje que hacen para superarlos.
Eso significa que el trabajo de tu personaje principal es atraer a los lectores a la historia, ni otro objetivo ni otro personaje, en la historia, tiene esa misión.
También quieren asegurarte de que tu personaje principal sufre luchas posibles. Temas de humanidad atraen a la humanidad. Así que cuando tu PP sufre de aflicciones humanas y comunes, los lectores van a hacer una conexión emocional con tu historia que los mantendrá queriendo más.
No olvides estos elementos importantes
Pero esos dos factores no son los únicos factores que se deben considerar al elegir un personaje principal. Aquí hay algunos elementos adicionales que entran en juego:
Descubrir a tu lector ideal.
¿Por quién estás escribiendo tu novela? Conocer a tu lector ideal hará diez veces más fácil elegir un personaje principal. Todo lo que necesitas hacer es soñar con un PP que hablará con su alma directamente a la del lector ideal. A menudo, eso significa simplemente crear un PP que es una imagen o un ideal de ese lector.
Identificar los temas de tu historia.
¿Qué mensaje (s) estás tratando de contar a lo largo de tu historia? ¿Qué cuestiones morales o éticas planteas?
Determinar los temas de tu historia, ayudará a elegir mejor un personaje principal. Considera qué tipo de personaje planteará o enfrentará mejor los temas que deseas discutir, y no olvides pensar brevemente en el género, la edad, la ocupación, las creencias, la crianza, el estado civil, el estilo de vida, etc.
Investigar historias similares.
Lo más probable es que haya al menos una novela en el mercado que puedas comparar con tu propia novela. Busca este libro y lee sobre su resumen y revisiones o cualquier pista sobre la eficacia de su personaje principal.
Saber cómo los lectores se sienten acerca de ese PP puede darte un montón de información sobre qué hacer con el héroe de tu propio libro o la heroína. Sólo asegúrate de evitar la creación de una copia de carbón de un personaje ya amado. El plagio no es cool,
Considerando la cultura y el realismo.
Tu historia merece ser tratada con realismo, no importa el género. Sí, probablemente tus personajes tendrán que enfrentarse a más basura en una semana de lo que haces en un año entero, pero llega un momento en que las cosas se van demasiado lejos. Ése es generalmente el punto donde los lectores pierden la confianza en el libro.El punto # 1 a considerar, al intentar mantener tu historia sobre la tierra, es la cultura. ¿Quién tiene el poder en la historia y quién es oprimido? ¿Qué clases sociales y religiones predominan? ¿Cómo son las políticas?
Si te deslizas sobre estas realidades diarias dando a tu PP el poder de ir a cualquier parte y hacer cualquier cosa, tu lector va a dudar de la plausibilidad de la historia. Pero si le das a tu PP límites y normas sociales a la altura de la realidad y la cultura, tu historia sonará verdadera.
Ahora, para crear un personaje principal bien desarrollado:
Ya estamos encaminados hacia la creación de un fabuloso personaje principal. Así como hay muchas capas en una pintura, hay muchos pasos diferentes para elaborar un personaje que los lectores amarán y recordarán por muchos años.Éstos son algunos elementos adicionales a considerar cuando se da forma a un nuevo personaje principal:
Hacerlos únicos.
Esta es un arma de doble punta. ¿Cómo es eso? Bueno, no solo quieres que tu PP sea diferente de los personajes principales de otros autores, sino que también quieres que se destaquen del elenco de apoyo de tu historia.
Nadie quiere leer acerca de la persona más común en el mundo. Simplemente no es emocionante. Es por eso que tu personaje principal necesita algunas circunstancias únicas, objetivo, motivación, habilidad, rasgo de personalidad, etc para que se destaquen entre la multitud.
¿Necesitas un ejemplo? ¡Hablemos de Elizabeth Bennet!
Elizabeth es sin duda un personaje único en el mundo de O & P. Ella no encaja perfectamente entre sus vecinos de clase media, ni florece entre los compañeros de clase superior del señor Darcy, gracias a su habilidad para hablar descaradamente. Elizabeth también rechazó una propuesta de matrimonio ventajosa (¡dos veces!), Lo cual no fue un gran negocio en la era de la Regencia, especialmente teniendo en cuenta las circunstancias de su familia.
Hacer su vida incómoda.
¿Has leído alguna vez un libro en el que nada sucede en el transcurso de más de 100 páginas? Es aburrido, ¿verdad?
Tales novelas claramente sufren de una seria falta de trama, y seré la primera en admitir que he abandonado esos libros por leer algo diferente. ¡No dejes que esto suceda a tu novela!
Cuanto más tiempo he estado involucrada en la comunidad de escritores, más me he dado cuenta de que los escritores se pueden clasificar en dos categorías: los que aman torturar a sus personajes y los que lo odian. Si eres de los primeros, puedes omitir este paso. Pero si eres un escritor que odia lastimar a sus bebés, necesitamos tener una charla.
Sé que es doloroso,. Sé que el envío de tus personajes en el grueso de los conflictos, haciéndolos sufrir la pérdida o enfrentar serios contratiempos, puede doler. Pero también hay que reconocer que son esos mismos conflictos -y las formas en que los manejan tus personajes- lo que hace que tu novela sea interesante de leer.
Así que hay que aumentar las apuestas. Hacer la vida de tu PP cada vez más complicada. Ser un poco malo, luego le damos a nuestro personaje la fuerza para darle vuelta a los golpes y luchar. Elizabeth Bennet hace esto y tiene un final feliz. ¡Te prometo que tus personajes también pueden hacerlo!
Ejemplo: En Orgullo y Prejuicio, Elizabeth maneja la adversidad cuando ofende a su mejor amiga Charlotte durante una discusión, y una vez más cuando su hermana avergüenza a su familia. A través de todo esto, Elizabeth nunca pierde la fe de que todo podría salir bien al final.
Darles Fallas.
A nadie le gustan las personas que lo tienen todo. A pesar de que esas personas no pueden ser felices en el interior, sus vidas parecen bastante perfectas para los espectadores, lo que puede hacer que sea más difícil para otros relacionarse con ellos. Lo mismo ocurre con nuestros personajes.
Considera lo enloquecedor que pueden ser los personajes casi perfectos. ¿Alguna vez has leído un romance donde la pareja líder es angelicalmente bella y al menos uno de ellos es rico más allá de lo creíble? Es suficiente para volverse loco, ¿verdad?
Nadie es perfecto. La gente tiene defectos, tanto físicos como en su carácter. Y no nos olvidemos de las infancias de mier** y las situaciones de vida nada perfectas. ¿Y quién, además de un narcisista, no tiene alguna inseguridad retumbando en el fondo de su mente, esperando a atacar en un momento de debilidad?
Tu PP necesita tener fallas y enfrentarse a los juicios. Épocas. Esto puede parecer frustrante, pero es ese mismo realismo el que atraerá a los lectores a la historia, haciendo que tus defectuosos personajes sean aún más entrañables. Así que no tengas miedo de repartir momentos difíciles, defectos y miedos.
Elizabeth Bennet tiene sus propias imperfecciones ...
Más allá de ser descrita como simple en apariencia, Elizabeth tiene una personalidad descarada en una sociedad que se enorgullece de la gentilidad. La situación de vida de Elizabeth tampoco es ideal. Ella vive con una madre tonta y varias hermanas frívolas que a menudo avergüenzan a la familia en público, sin mencionar que su familia debe prepararse para pedir su sustento a un primo lejano, poniendo a las hijas en una situación social precaria.
Estas circunstancias pueden parecer duras, pero son esas mismas fallas y luchas las que hacen que Elizabeth y Orgullo y Prejuicio sean un todo, una historia rica y entrañable.
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¡Uf! Lo hicimos. ¿Voy a asustarte si digo que todos esos consejos eran sólo el comienzo?
¡Tranquilos!
Acabo de mostrarte los fundamentos de la construcción de un personaje principal adorable y relatable, pero ahora es el momento de tomar ese esquema y aplicarlo en la piel de un personaje en el que los lectores pueden invertir su tiempo y terminar satisfechos.¿Cómo puedes hacer eso? Recomiendo leer este post de personajes bien desarrollados, luego saltar a 33 maneras de escribir personajes firmes. No te arrepentirás. Lo prometo.
¡Gracias por leer!