La política es una de las ciencias sociales. Los pediatras sociales no van a ser ajenos a la política porque es el mejunje en el que estamos metidos. Las situaciones sociales que afectan o se ven afectadas por la salud están ligadas a propuestas, decisiones, condiciones o realidades políticas.
Este fin de semana los españoles concurren al ejercicio democrático periódico de elegir sus representantes en las cortes, diputados y senadores y, con ello a quienes formen el gobierno ejecutivo del estado. Dejar un día en medio para que se pose la polvareda y el ruido de la campaña electoral puede ser una costumbre prudente para serenar la decisión del voto. Pero muchas otras instituciones, naciones o poderes que usan métodos de elección democráticos perfectamente homologados no se toman ese respiro. Todo son convenciones.
Con la elección de representantes políticos determinamos como va a ser el futuro más próximo, al depositar en ellos la confianza de la mayoría y, supuestamente, el respeto a la minoría o minorías.
Los estudios de opinión, y la misma evolución de la campaña electoral nos van anunciando que el poder va a quedar algo más repartido entre diferentes opciones, en cualquier caso más de una y que se va a hacer posible una situación de pactos y balances de alguna forma nueva en el estado español. En otras partes la concurrencia de varias opciones y el correspondiente reparto de poderes ya hace tiempo que, como sucede en Cataluña, es lo habitual.
No vamos desde esta plataforma a enjuiciar la legislatura que concluye ni tampoco evaluar las opciones o partidos que se presentan. Sin embargo sí lamentar que la atención a la infancia y la defensa de los derechos de los niños no hayan ocupado más espacio en una u otras. Queda mucha tarea por hacer y convendría que los políticos prestaran más atención a un grupo de población que no vota, pero que es el depositario nada menos que del futuro.
Y a los que esto lean les animamos a que ahora que tienen oportunidad reflexionen. Y que el domingo 20 de diciembre aprovechen la oportunidad de participar activamente en el proceso electoral. Que elijan sus preferencias y después mantengan su atención para ver si los elegidos cumplen con lo que se les ha encargado.
X. Allué (Editor)