Reflexiones de verano: A veces no necesitas demostrarte a ti misma que puedes

¿Cuántas veces haces cosas para demostrarte a ti misma que puedes?

Que eres válida, que estás a la altura, que tú siempre consigues lo que quieres, etc. Si te sientes identificada, ten en cuenta esto…

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Durante un tiempo pensé en sacarme las oposiciones para ser policía científica. (Sí, nunca sabes por donde te voy a salir, jajajaja).

Había considerado esa opción al acabar la carrera.

Al final la descarté porque me gustó otra más y después de mil años, como me aburría un poco y quería hacer algo nuevo, me acordé de eso.

Luego, pensando bien en los detalles, no quería dedicarme a eso. A saber dónde me mandaban y empezar de cero no me apetecía, pero oye podía probar y sacarme las oposiciones.

¿Y para qué? Para demostrarme a mí misma que podía.

Pero sabes qué…

¿Qué necesidad hay de invertir tiempo, dinero y energía en algo sólo para demostrarte a ti misma que puedes?

¿Tiene sentido?

Hazlo porque quieres hacerlo, porque te hace ilusión, te apetece, vas a disfrutar del proceso, y déjate de demostraciones.

No necesitas demostrarte tantas cosas. Necesitas hacer lo que te haga feliz.

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Eso es lo que hará que te sientas en paz, contenta y realizada. No pasarte la vida corriendo demostrándote a ti misma (o a los demás) que puedes.

Puedes, pero mejor emplear tus recursos en algo que te haga feliz, no en demostraciones.

Haz lo que te haga feliz.

Y si no sabes lo que es, empieza por aquí.

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