Siempre he defendido, desde este blog, que la reforma laboral, promovida por el Gobierno Zapatero, es una gran mentira, impuesta por el mercado para preservar sus beneficios, reducir el coste de la mano de obra, abaratar aún más el despido y fomentar la inestabilidad. Nos han querido, con trampas y engaños, hacer creer justo todo lo contrario, pero la realidad ha terminado por imponerse y ahora, cuando llega el momento del balance, el diario El Correo pone blanco sobre negro y constata que la reforma laboral no crea empleo, no acaba con la precariedad y tampoco genera crecimiento económico. Una razón más para pensar el voto y apostar por una izquierda comprometida con los derechos sociales y laborales, que piensa en las personas y no en los intereses de la banca y las grandes empresas.