Refugios de Amor

 En el hogar no es sólo cocinar y limpiar sin ninguna paga, aunque esto, claro, es trabajo.
Se trata de la mucho más sutil contribución que el amor aporta al hogar.
No es trabajo penoso porque el amor es placentero, pero resulta decisivo al menos para otra persona, y muchas veces para varias.
Un oído atento, una caricia alentadora, galletas, limonada, risas y cariño.
¿Cuanto vale eso? Para los niños, casi todo.
Los niños pasan por muchas experiencias amargas.
Los remansos de amor constituyen una red fundamental que ayuda a compensar las carencias y diferentes circunstancias.
También los adultos buscamos esos refugios de amor a veces idílicos que lejos de lograrlo nos alejamos de nuestro propósito inicial.

Recordarnos hacia donde vamos...
El proceso de este andar es un aspecto muy importante de autoconocimiento.
De atención plena en nuestra cotidianidad.
Los refugios de Amor verdaderos son aquellos que pueden aceptar, reconocer, y fortalecer a sus miembros. En las que los Egos no están demasiado inflados
Esta tarea deseada parte de lo real huyendo de lo ilusorio hacia lo posible.
Es el andar, aprender de y con los obstáculos y saldar cuidando el presente.
Cuando estos refugios son alimentados por Amor verdadero construyen y elevan.
Salvan vidas.