¡Buenos días! ¿Que tal marcha la semana? Yo a escasas dos semanas de cambiar de década un poco... no se muy bien cual sería la palabra exacta para definirlo, pero teniendo en cuenta que los últimos años el día de mi cumpleaños no es muy bien recibido por mi parte, ya veremos como lo paso este año... ya os contaré.
Pero no quiero hablar de mí, porque hoy quiero presentaros a otra cumpleañera, que ya hace unos mesecitos disfruta de sus 26, quien los pillara!! Y para celebrar ese momento especial y que lo recordará durante mucho, mucho tiempo, su hermana Laura decidió encargarme una fofucha personalizada. A Laura ya la conocéis porque os he hablado varías veces de ella, ya que ha confiado en mí para hacer otros regalos especiales, como La muñequita para su prima Lea, y la pareja de amigos como regalo de despedida para Erika y Xavi.
Tengo el gusto de presentaros a Mini-Elisabet:
¿Quieres conocer el porqué de todos los detalles? Pues sigue leyendo para descubrir que nada esta puesto al azar.
Una de las características que hacen especiales a mis fofuchas es incluir detalles característicos de la persona que recibe el regalo, y en este caso no iba a ser menos, Elisabet es psicóloga especialista en niños, de ahí que no podían faltar los libros que guarda con cariño en su estantería ni tampoco un dibujo realizado por un "niño".
¿Niño? Bueno un niño grande, que no es otro que mi novio, que encantado ha colaborado en el regalo de Elisabet dibujando su "perrico", y tirando de recursos para crear un dibujo digno de concurso de guardería. El Perrico es su dibujo estrella, no os podéis imaginar en la de papeles despistados que aparece, papel disponible, papel con dibujito, y tras la colaboración esto solo ha hecho que empeorar... Cual niña del sexto sentido podría decir: En "muchas" ocasiones veo dibujos de perros...
Los colores de la base tampoco son casuales, ya que Elisabet es también profesora de Inglés y que mejor representación que los colores blanco, rojo y azul de la bandera del Reino Unido.
Para representar su cumpleaños una gran tarta con las velas listas para pedir un deseo, por cierto la tarta esta inspirada en una que me comí ese mismo día, gracias a una compañera de curso que la llevo a clase por su cumple.
Ni que decir tiene que el estilismo esta copiado de uno de la propia Elisabet. Vaqueros, jersey rojo, pañuelo rojo con puntitos... y para las cosas que no tenía referencia, pues un poco de imaginación que también se trata de eso ¿No crees?
Y como siempre un regalo personalizado es un gran acierto, porque Elisabet estaba super contenta con su Fofu-Yo y Laura quedo genial con el regalo.
Tú que prefieres, ¿Un regalo personalizado o un regalo de los de toda la vida? Que gran dilema porque la respuesta puede no ser sencilla, ¡¡espero tu opinión en los comentarios!!