Por vez primera un equipo de investigadores ha logrado
regenerar un tejido humano a partir de células madre humanas adultas
purificadas. Se había hecho con la sangre, pero no en un tejido como la córnea. Lo que el equipo de Frank,
Natasha Frank y Bruce Ksande acaba de lograr es regenerar en vivo un córnea dañada con el uso de células madre adultas, un hallazgo que permitirá el abordaje de las lesiones de la córnea en humanos y así restaurar la visión.
La clave está en el «uso de una molécula conocida como
ABCB5, que actúa como un marcador para las ‘escurridizas’ células madre
del limbo». Los resultados que se publican hoy en «Nature» constituyen una ‘promesa real’ para aquellas personas que han sido víctimas con lesiones oculares.
Las células madre del limbo residen en el epitelio limbar
basal del ojo o limbo y ayudan a mantener y regenerar el tejido corneal.
Su pérdida debido a una lesión o enfermedad es una de las principales
causas de ceguera. En el pasado, los trasplantes de tejidos o células se
han utilizado para ayudar en la regeneración de la córnea, pero no se
sabía si había células madre limbares en los injertos o si las había,
cuál era su número.
Las células madre no están en la córnea, sino en el
limbo, una fina circunferencia entre la córnea y la conjuntiva. Allí las
células se dividen, se especializan en el epitelio corneal y migran
hacia la córnea, pero hasta ahora no había marcadores para
identificarlas estas células madre: «Se sabía que estabann, pero no se
había obtenido el marcador para identificarlas».
Se abre una puerta a la esperanza de tantos pacientes, con problemas en la córnea. Y hablo, desgraciadamente, por experiencia propia.