‘Reikiavik’ es el título de la nueva novela de Pablo Sebastiá, que reseña nuestro colaborador Antonio Parra en esta entrada.
TítuloReikiavik.Editorial Reino de Cordelia. Madrid 2018. 296 págs.
Datos del autor
Pablo Sebastiá Tirado (Castellón de la Plana, 1973) es escritor y periodista. Licenciado en Derecho por la Universitat Jaume I, ha trabajado en varios medios de comunicación, tanto audiovisuales como de prensa escrita y ha publicado las novelas El último proyecto del doctor Broch (2007), La agenda Bermeta (2008), El último grado (2010), Secreto de estado (2011) y La sonrisa de las iguanas (2014). Es miembro del comité organizador del certamen internacional de crimen y ficción Castelló Negre y forma parte, a su vez, del colectivo 12 Plumas Negras.
Sinopsis de la obra
Después de haber sido durante años los capos de la mafia en Barcelona, los Ferrutti, dueños de locales de juego clandestino, reyes del tráfico de drogas y de la trata de blancas, yacen inertes en uno de sus antros. Parecían ejercer el control sobre toda la ciudad y tener a la policía a su servicio, pero Hannu se confirma como el mejor para eliminar escoria humana de la faz de la tierra y nunca deja un cabo suelto. Esta vez, sin embargo, una joven y su bebé se cruzan en su camino y en el de su fiel compañero, un rottweiler gigantesco de color azabache. Juntos deben huir del resto del clan de los Ferrutti y de una Barcelona corrupta y sumida en el odio. Pablo Sebastiá Tirado nos sumerge en los bajos fondos barceloneses, pero también nos lleva de viaje hasta Islandia e, incluso, al futuro.
Reseña
Tensión criminal
Un gigante albino y un rottweiler, imaginen la escena, sobre todo si el hombre porta un arma y una determinación sin límites en unos gélidos ojos azules. Como para pensarse dos veces lo de plantarles cara, ¿verdad?, pues con eso juega Pablo Sebastiá ya desde el mismo inicio de la novela, potente como pocos, porque el hombre tiene el encargo de liquidar a los hermanos Ferrutti, los dos capos más importantes del juego y la prostitución en Cataluña. Con semejante inicio, lo que viene después ha de ser una montaña rusa de acciones y reacciones, de golpes, huidas, disparos, amenazas…, pero controladas tanto por la frialdad de este hombre, llamado Hull, como por la trascendencia de la conducta de Reikiavik, el perro, que no necesita ladrar para hacerse entender, porque con una simple mirada su amo es capaz de saber lo que el compañero desea. Algo tienen los perros que en los últimos tiempos se están haciendo muy presentes en la novela negra (véanse los casos de Daniel Fopiani o David Jiménez El Tito), acaso la sociedad esté tan deteriorada que es mejor para un protagonista tener como amigo a un can que a un humano. Por si esta trama no fuera ya lo suficientemente atractiva, súmenle una madre dispuesta a proteger a toda costa a su bebé, un anciano padre, “deshijado”, que busca venganza, y por fin una segunda trama, anterior a la actual, en la que una misteriosa corporación afincada en Islandia anda investigando en secreto las posibilidades de la teletransportación animal y por fin con humanos. Cualquier lector del género que se precie ya ha encontrado a estas alturas motivos suficientes como para hincarle el diente a la novela, pero por si no fuera así, debemos resaltar el lenguaje de Pablo Sebastiá, la forma que tiene de encadenar acontecimientos, tanto de la trama actual como de la pasada, y la gradual disposición de la tensión narrativa, que se nos va presentando a pequeños sorbos. Es justo insistir en el papel del perro, protagónicamente casi al mismo nivel de Hull, o de la importancia que tiene el misterioso John Smith y los científicos que experimentan con él, como también es justo reconocer el mérito del autor a la hora de la pintura de ambientes, sobre todo reparando en los contrastes evidentes entre Islandia y la Costa Brava, aunque en ambos pueda haber caliente tensión criminal.https://punica.es/reikiavik-pablo-sebastia-resena/?fbclid=IwAR3pyPuYnn-IjFheKv3m5OIOsqPVwaDAMwkyXyc5bnC3SpxmgP7676MWDrw