De un 5 y un 10% de los niños en edad escolar sufren TRASTORNO DE DÉFICIT DE ATENCIÓN CON HIPERACTIVIDAD. Su origen exacto sigue sin conocerse, pero algunos estudios sugieren que puede deberse a una falta de desarrollo en ciertas áreas del cerebro, principalmente del córtex frontal (lado derecho sobre todo) que es “JEFE EJECUTOR”, es decir, la área implicada en la atención selectiva, la planificación motora y la ejecución de las tareas.
En la revista “Science” se publicó un estudio que determinaba las áreas cerebrales que controlan la atención visual. Se registró una respuesta en tres áreas principalmente: las cortezas del lóbulo frontal (detrás de la frente), del lóbulo prefrontal (delante del lóbulo frontal) y el lóbulo parietal (detrás del lóbulo frontal).
En dicho estudio se comprobó que cuando observamos una escena y un objeto aparece de forma repentina en nuestro campo visual, las neuronas que se estimulan antes, son las procedentes del lóbulo parietal; mientras que cuando tenemos que buscar un objeto entre otros, las que se estimulan primero son las frontales antes que las parietales.
La atención visual consiste en un circuito cuya entrada es la información que capta la retina y su salida es la respuesta a través del sistema oculomotor. Un déficit en la atención visual está relacionado con una dificultad para mantener la fijación en un objetivo, seguirlo cuando se mueve y saltar a otro cambiando nuestra atención a él.
Como contaba en una entrada en mi otro blog, “¿Dónde va lo que vemos? – Procesamiento de la información visual (del ojo al cerebro)”, el proceso de atención implica principalmente 3 áreas en el cerebro: lóbulo occipital, lóbulo temporal, y lóbulo parietal. Y basado en esto, el proceso de la atención sigue 3 vías en el cerebro:
El proceso de la atención básicamente se produce por la relación entre tres “sistemas neurofuncionales”: de alerta, de atención posterior o perceptiva y de atención anterior o supervisora.
- El primer sistema o `sistema atencional de alerta’, suministra lo que denominamos ‘consciencia’. Una alteración en él provoca desde estados confusionales hasta estados comatosos. Este sistema depende del SISTEMA RETICULAR MESENCEFÁLICO.
- El segundo sistema, el `sistema atencional posterior’ nos permite seleccionar la información prioritaria del entorno. Este sistema depende de:
- CORTEX PARIETAL sobre todo derecho: responsable de la atención selectiva y focalizada.
- PULVINAR LATERAL: implicado en la supresión del ruido (estímulos irrelevantes) y la potenciación de las señales significativas que preceden a la percepción y acción.
- COLÍCULO SUPERIOR.
- El tercer sistema o ‘sistema atencional anterior’ regula la dirección y el objetivo de la atención, es decir, suministra el control voluntario de la atención. Una alteración en este sistema es responsable de los trastornos de atención con y sin hiperactividad. Este sistema depende del CÍNGULO y CORTEX PREFRONTAL LATERAL.
Este córtex, por un lado, está conectado a través de vías corticales con todas las áreas del neocórtex, por tanto, integra información multisensorial. Por otro lado, también tiene conexiones con las regiones subcorticales y límbicas. “Desempeña un importante papel en priorizar estímulos, referenciarlos a representaciones internas, dirigir apropiadamente la atención, monitorizar la secuencia temporal de acontecimientos, formular conceptos abstractos y llevar a cabo otras funciones ejecutivas”.
Debido a lo complejo que es el proceso de la atención es muy complicado asociarlo a una única estructura del cerebro o examinarlo con una sola prueba. Para evaluar la atención bien, realmente se debería evaluar la capacidad de alerta, la orientación, la focalización, la exploración, la concentración, la vigilancia, la inhibición del ruido o de respuestas automáticas…; muchos aspectos determinan la atención.
‘Prestar atención’ consiste en una respuesta cerebral manifestada como un esfuerzo neurocognitivo consciente e inconsciente, que precede a la percepción, a la intención y a la acción. Así, debido a que la cantidad de información que nos llega a través de los ojos al cerebro, es tan grande, inconscientemente dicha información es filtrada, en mayor o menor grado, y se procesa sólo aquella que consideramos necesaria, ignorando el resto.
Esto se puede ver claramente en este video. Consiste en un experimento de atención, en el cual, debes contar la cantidad de veces que el equipo de blanco se pasa la pelota. La prueba sólo vale si ves el video una sola vez.
Vale, ¿ya lo has hecho?
La respuesta es 13. Pero eso no es lo importante. Lo importante, es ¿te has dado cuenta del gorila que ha cruzado por medio de los jugadores?
La respuesta más normal es "NO".
Si esa es tu respuesta, no te ocurre nada. Al concentrar nuestra atención en los jugadores, el Pulvinar ha ignorado lo que no consideraba importante y los cortex parietal y prefrontal lateral se han centrado en los jugadores de blanco.
Algo diferente sería si hubieras sido consciente del gorila a costa de perder el ritmo de los jugadores ¿Tienes normalmente problemas de atención o concentración?
Para más información leed este artículo, es muy interesante.