Se le tribuyó la creación del mecanismo a Jan Hanus y su asistente Jakub Cech, situándola alrededor del año 1490. Sin embargo pudo comprobarse que es mucho más viejo aún; el relojero Mikulas de Kadan y Jan Ondrejuv conocido como Sindel, habrían instalado en el año 1410 el disco superior, es decir, el cuadrante astronómico.
Sería en una segunda fase que el maestro relojero Jan Hanus mejoraría el mecanismo ya instalado y agregaría debajo, justo sobre la puerta, el disco calendario.Una escalera muy estrecha y en forma de caracol conduce al habitáculo trasero donde se encuentra instalada la maquinaria original.
Segun la leyenda…
Los consejero se sentian muy orgullosos de su reloj astronómico, pero comenzaron a llegar rumores de que el maestro relojero, dado su gran éxito con el reloj de Praga, había recibido numerosas ofertas de muchas ciudades.
Lo citaron engañado y lo ataron fuertemente a una silla y comenzó a ver cómo uno de los custodios blandía su espada cerca de las llamas del hogar enrojeciendo su punta. Se desmayo y cuando pudo despertar unas horas después en el lecho de su morada. Sentía un fuerte dolor, escuchaba el llanto de su familia y de sus discípulos pero no podía verlos: habían sellado sus ojos.
El reloj lo llaman “ORLOJ” así le dicen los checos.
Pasó el tiempo el maestro se había enfermado poco a poco, física y emocionalmente pero las personas seguían yendo para admirar su maravillosa obra al edificio del ayuntamiento.
Hanu pidió una última voluntad que le fue concedida: Quiero tocar por última vez mi Reloj Astronómico, será mi despedida. Y se lo concedieron sin apenas sospechar que tenía una gran venganza preparada.
De este modo, el maestro Hanus consiguió acercarse al Reloj Astronómico, lo tocó suavemente, encontró la pieza que solo él sabía y hundió brutalmente su brazo en una pieza que detenia el complejo engranaje. Sí, rompió el reloj.Evidentemente, Hanus quedó manco, aunque en pocos segundos murió. Unos dicen que desangrado. Otros, que asesinado.
Posterior a la muerte del maestro, se dijo que una maldición recaería sobre todo aquel que intentara reparar el reloj, volviéndolo loco o muriendo Más allá de la leyenda, lo cierto es que muchos, muchos años pasarían, antes de alguien lograra reparar el complicado mecanismo del reloj de Hanus.
Otro motivo mas para visitar Praga. Me encantan los monumentos con leyendas!!
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Te espero en mi proximo destino. En mi proximo post.
Lore
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