Revista Cine
Arthur Newton era el protagonista de los libros de inglés del instituto. Sus vivencias diarias servían de excusa para aprender el idioma y quedó de esta forma grabado en mi memoria.Recuerdo que era más bien desafortunado y siempre con problemas, pero al fin consiguió casarse con la chica que le gustaba y encauzar un poco su vida. Y aquí, si no me fallan las neuronas, es al punto donde quiero llegar: Arthur quería ser escritor, pero su trabajo y quehaceres diarios le impedían dedicarse a esa tarea en cuerpo y alma. Y eso que su mujer era de familia adinerada y podría permitírselo, pero sus suegros no estaban por la labor de mantener a un yerno sin un trabajo digamos estable.No es este mi caso, aunque existen ciertos paralelismos. Yo también quiero escribir y mis quehaceres diarios me dejan poca opción para hacerlo de forma continuada y satisfactoria en cuanto a conseguir unos objetivos. Y como aquí no existe la figura de la familia adinerada, a lo mejor puede ocupar ese papel algún mecenas que lea esta entrada y esté interesado en darme ese empujón en forma de tiempo que tanto necesito.Aquí queda hecho el llamamiento como si fuera una botella de naúfrago lanzada al mar digital. Que haya suerte.