Con la llegada del otoño, los salmones empiezan a remontar los ríos en busca de las zonas de desove. Aun tendrán que pasar casi dos meses para que se produzcan las primeras puestas, y hasta entonces tendrán que superar cascadas y saltos de agua y pasar por zonas de fuerte corriente quedando en ocasiones casi en seco.
¿Cómo se vería la remontada de uno de los ríos cantábricos por los ojos de un salmón? Quizás sería algo parecido a esto:
Durante su estancia en el río, los salmones apenas se alimentan, por lo que toda la energía necesaria para realizar este viaje la obtendrá de las reservas acumuladas durante los meses previos.