Renovación socialista

La vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, ha lamentado “la mala suerte” de España por “tocarle” una “derecha reaccionaria y mentirosa“, que además es “cruel” y que prepara “una nueva vuelta de tuerca en el cuello de los trabajadores” con una “segunda ronda” de la reforma laboral.

Valenciano ha intervenido en la inauguración del congreso extraordinario del PSOE-A, que elegirá a Susana Díaz como nueva secretaria general en sustitución de José Antonio Griñán, donde ha sentenciado que “España se merece que la gobiernen los socialistas“.

No podía ser más manida la expresión de derecha reaccionaria y mentirosa, aunque de la Sra. Valenciano tampoco se esperaba mucho más, aparte del encendido discurso en defensa del actual líder socialista, su propio mentor y el único pasaporte de Dª Elena para seguir en la alta política en vez de dedicarse a otros menesteres menos relevantes. España no merece que la gobiernen los socialistas y actualmente, tampoco los populares; estuvo acertado en fechas recientes el Sr. Pons, cuando dijo que el PP es una formación política tan honrada como todas, lo que equivale a decir que las comisiones, la financiación irregular, la contabilidad B y la prevaricación forman parte de la rutina diaria en los partidos. Dª Elena hacía una exaltación encendida del PSOE obviando que aún soporta el peso de FILESA, de poseer el extraño record de tener a un ministro en prisión, de los GAL o de los EREs andaluces. Nadie se engañe pensando que los socialistas forman parte de la izquierda, al contrario, durante el gobierno de Zapatero fue cuando más pisos se construyeron y cuando más dinero se inyectó a la banca, para después atribuir la responsabilidad de lo sucedido al gobierno saliente. Luego desde la oposición se lamentan de una derecha reaccionaria a la que jamás consentirían medidas tan impopulares como las adoptadas por ellos mismos durante su etapa de gobierno.