Desde que los árabes (entonces no se consideraban a si mismos palestinos) en 1929 exterminaron y limpiaron étnicamente de judíos la ciudad, sagrada para el pueblo judío, de Siquem (Hebron), ésta se ha mantenido como un foco de antisemitismo y odio al judío.
Hoy en día un judío necesita protección militar si se atreve a vivir allí, de no ser así seria con toda probabilidad asesinado por extremistas palestinos.
La violencia forma parte del nacionalismo palestino y de su politica, tanto del regimen de apartheid de la Autoridad Palestina como de sus opositores.
Por eso no es de extrañar las siguientes imágenes de una protesta de la organización islamista radical Hizb al-Tahrir por la detención de algunos de sus miembros y la policía de la Autoridad Palestina que reprimía dicha protesta sin florituras ni miramientos.
Lógicamente ningún autodenominado defensor del pueblo palestino ha protestado en Occidente.
Fuente: MaanNEws