A un año de la visita de Obama a Cuba el incremento de la represión es el único saldo que puede contabilizarse de un extremo al otro de la isla.
Una familia de Guantánamo cuenta su odisea para demostrar que la ola represiva tiene lugar a todo lo largo y ancho del país.
Yurisleinis Agüero sufre las consecuencias de su decisión de formar parte de las Damas de Blanco en su territorio.
Ahora cada uno de los miembros de su familia experimenta los abusos del poder de la policía en el extremo oriente cubano.
Cubanet tuvo acceso a esta familia cubana y comparte su testimonio.
Con información de Cubanet.
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