Cuando Apple anunció el año pasado que estaba desarrollando un reloj que tenía las funciones de un dispositivo médico se hizo evidente que la compañía estaba considerando la industria de 3 trillones de dólares que existe en torno a la atención de la salud; que la industria de la tecnología ve la medicina como la próxima frontera para el crecimiento exponencial.
El reciente anuncio de ResearchKit de Apple muestra que tiene una ambición aún mayor: Quiere transformar también la industria farmacéutica, cambiando la forma en que se realizan los ensayos clínicos.
ResearchKit es una plataforma que permitirá capturar y cargar los datos de los pacientes que tienen una enfermedad en particular. Nuestros smartphones ya vigilan niveles de actividad, estilos de vida y hábitos. Saben a dónde vamos, lo rápido que nos movemos, y cuándo dormimos. Algunas apps ya tratan de juzgar nuestras emociones y salud.
Las apps incluidas ya en ResearchKit permitirán un monitoreo constante de los síntomas y de las reacciones a medicamentos.
Hoy en día, los ensayos clínicos se realizan en un número relativamente pequeño de pacientes, y las compañías farmacéuticas a veces optan por ignorar la información que no les conviene. Los datos que reunirán nuestros dispositivos se utilizarán para analizar con precisión los medicamentos que el paciente ha tomado, con el fin de determinar cuál de ellos realmente tuvo un efecto positivo, las reacciones adversas y nuevas dolencias.
Apple ya ha desarrollado cinco aplicaciones que se dirigen a los problemas de salud más prevalentes: diabetes, asma, enfermedad de Parkinson, la enfermedad cardiovascular y el cáncer de mama. La aplicación de Parkinson puede por ejemplo medir temblores en las manos a través de una pantalla táctil iPhone; temblores vocales gracias al micrófono, o la marcha, mientras el paciente camina con el dispositivo.
Google y Amazon van un paso por delante de Apple en los datos que capturan. Google también anunció el año pasado que está desarrollando una lente de contacto que puede medir los niveles de glucosa en las lágrimas de una persona y transmitir estos datos a través de una antena más delgada que un cabello humano. Además, están investigando con nanopartículas, que podrían detectar cánceres y otras moléculas en el interior del cuerpo y notificar a un ordenador portátil en la muñeca. Del mismo modo, tienen una línea de investigación centrada en el control del envejecimiento.
En 2013, Google hizo una importante inversión en una compañía llamada Calico, para investigar las enfermedades que aquejan a las personas mayores, como la neurodegeneración y el cáncer. Su objetivo es entender el envejecimiento y, en definitiva, prolongar la vida.
Es posible que nos hayamos visto decepcionados con los avances de la medicina en el pasado. La buena noticia es que la industria de la tecnología está a punto de cambiar todo esto. Los próximos años van a ser increíbles