Reseña #439 - Tocar el cielo, Haizea M. Zubieta

¡Holaaa! Tenía muchas ganas de traeros esta reseña porque es un libro que me ha flipado y que tengo muuuchas ganas de recomendar. Os hemos traído hace unos días el Conociendo Autores de Haizea M. Zubieta y hoy, por fin, se publica la reseña de su nueva novela: Tocar el cielo. Tenía bastante miedo con este género, porque era, creo, mi primera toma de contacto con el urban fantasy, pero tengo que reconocer que voy a volver a leer este tipo de libros, porque me ha flipado.

Tocar el cielo cuenta la historia de Noa Gálvez, una chica de dieciséis años que vive en Madrid y tiene que recorrerse las calles y las estaciones de metro en silla de ruedas tras haber perdido las piernas en un accidente de coche. Un día, un olor un tanto especial la guía hacia la casa de una familia de vampiros, la familia Dragulescu, que necesitan aumentar el número de miembros de su clan porque están en peligro, ya que un grupo de cazadores de vampiros van a por ellos. A cambio, ofrecen a Noa la posibilidad de volar. De tocar el cielo.

Haizea ha construído unos personajes a los que he cogido muchísimo cariño, Noa, una prota concebollista, vaya, que le gusta la tortilla de patata con cebolla, su abuela Conchi que es la repera, su tío Rafael, que es un cuñado de los de Forocoches...pero con letras mayúsculas, y sus padres que se tienen el cielo ganado. De verdad, qué cariño les he cogido a Toño y Maricarmen. Son geniales. Por otra parte están los Dragulescu, de quienes tengo que destacar a Liliana Dragulescu, que me ha sacado de quicio en algunas escenas y me ha encantado a partes iguales. No os quiero hacer mucho spoiler sobre los Dragulescu, simplemente os diré que son una familia de vampiros muy especiales y muy a la orden del día. Lejos quedó lo de convertirse en cenizas si les da el sol o ser ahuyentados con el ajo o la cebolla, Haizea ha traído a una familia de vampiros a Madrid en pleno siglo ventiuno y ha conseguido que encajen en la era de las tortillas con cebolla y la crema solar.

La autora de Tocar el cielo nos comentaba en la entrevista que la movilidad y la accesibilidad eran temas muy importantes en la novela y que por eso había escogido Madrid como ubicación. Creo que ha sido una elección muy acertada, ya que se nota que la autora no solo se conoce Madrid como la palma de su mano, sino que además es consciente de las varias barreras arquitectónicas existentes de la ciudad. Considero que muchas veces la gente simplemente mira para otro lado cuando hay alguien con problemas de movilidad, sea ciego, sordo o vaya en silla de ruedas, y que es necesario poner el foco de atención en estas personas, sobre todo en las novelas juveniles, porque creo que es algo en lo que, por desgracia, no te fijas hasta que te toca de cerca.

La pluma de la autora es súper ágil de leer, muy a la orden del día, con bastantes memes y expresiones de Twitter, que me han hecho sentir como si la propia protagonista fuese una amiga que me está contando su historia. Y eso que está narrado en una tercera persona con el foco puesto en la protagonista.

En conclusión, leed a esta autora, que mola mucho.