Encontré La compañía amable de casualidad mientras cotilleaba en la página de Cerbero. La portada me llamó la atención, y la sinopsis me ganó al presentarme una compañía de mujeres que, después de muchos años, deciden volver para ayudarse las unas a las otras. Este libro se ha convertido en uno de mis favoritos, y aquí os explico por qué.
El éxito de esta historia depende 100% de la construcción de los personajes, y Rocío Vega lo ha clavado. La narrativa principal se desarrolla en capítulos centrados en el presente, mientras que capítulos intermedios que se centran en distintas aventuras del pasado de la compañía sirven para entender el mundo y conocer mejor a los personajes. Me gustó muchísimo esta división, ya que, además de hacer la lectura muy dinámica, ver sus acciones y actitudes cuando eran jóvenes sirve para entenderlas mejor cuando las vemos de mayores. Es una manera muy interesante de ver la evolución de un personaje. La mayoría de sagas de fantasía que suelo leer acaban con la disolución del grupo, o con una insinuación del futuro de los personajes que, aunque incierto y puede que interesante, ya no es relevante para el conflicto principal. En La compañía amable encontré algo que no sabia que quería tanto, y es la historia de lo que pasa después. Cuando el grupo ya no es tan joven y ya no necesita luchar para ganarse la vida o salvar el reino o lo que sea, ¿seguirían allí si los otros les necesitasen? Esta novela aparece en goodreads como la primera de una saga. Y desde luego es una manera maravillosa de empezarla. La compañía amable me impresionó en tantos aspectos que lo mejor que puedo hacer es destacarlos en una lista para que veáis por qué tenéis que salir de este blog corriendo ahora mismo para pediros el libro:
- Un escenario que se aleja de la clásica tradición medieval anglosajona (si leéis fantasía estaréis, como yo, un poquito aburridos ya de esto) y nos ofrece un mundo inspirado en la riquísima herencia andalusí de la cultura española. Mi misión en la vida ahora mismo es encontrar más libros así y leérmelos todos.
- Una de las mejores (y más realistas) representaciones de la amistad que he leído. Ni son perfectas, ni lo pretenden. No todo son arcoíris y rayos de sol, hay altibajos y rencillas. Pero, ante todo, son amigas.
- El libro parecía empezar siendo una aventura normal. Algo entretenido para pasar el rato. Pero al final del primer capitulo da un giro inesperado que introduce la disposición al conflicto y la dualidad moral de la historia.
- En muchos momentos, mientras lo leía, me veía a mí misma. A mis amigas. Nos encontraba un poco a cada una en los distintos personajes, y creo que conseguir esto es tan importante como crear un mundo increíble o una historia trepidante, pero más difícil de lo que parece.
Todo lo bueno de la fantasía clásica de aventuras se une aquí con lo mejor del panorama actual, que poco a poco es cada vez más inclusivo. Esto no debería ser algo que destacar, y ni siquiera debería decir que es inclusivo, si no que es real. Que no pretende que el mundo está compuesto por personas heteronormativas y que la más mínima intención de incluir algo distinto a eso es parte de un discurso político. Que no se esconde en el típico "bueno, pero es poco realista incluir esto y aquello porque son otros tiempos" mientras que los dragones, la magia o similares son perfectamente aceptables. Pero, hasta entonces, os diré que La compañía amable me hizo darme cuenta de que nos hacen falta muchas más historias de fantasía reales.
¿Lo habéis leído? ¿Qué os ha parecido? ¿Qué otros libros de fantasía me recomendáis? Contadme en comentarios, ¡hasta la próxima!