Resumen: Año 1955. El inspector Ernesto Trevejo recibe el encargo de investigar cuatro crímenes en un pueblo de la sierra madrileña donde se está construyendo un pantano: dos guardias civiles han sido torturados hasta la muerte; el alcalde del municipio y su esposa, ejecutados a sangre fría. Un posible asesino en serie podría aterrorizar a la región mientras se desarrollan las obras. El asunto debe ser resuelto–y silenciado- cuanto antes. Siguiendo los pasos de una investigación que destapará odios, secretos e intereses ocultos, el lector se traslada a una España en blanco y negro. De fondo, el rumor incesante de la lluvia que acompañará al protagonista en su viaje a un escenario rural, remoto, casi salvaje. El extraordinario debut de Luis Roso en el género noir es al mismo tiempo un adictivo thriller literario y una mirada nueva sobre los años más duros del franquismo.
Mi opinión personal (sin spoilers) Sí, desde la primera palabra quede asombrada por la narración de esta historia, hemos leído mucho sobre esta época, los años 50 en España. Una época de la que ahora no me apetecía nada leer, pero seducida por conocer nuevos escritores me decidí y encontré una magnífica novela negra. "Recuerdo que la mañana del diecisiete de enero de aquel año de 1955 me desperté junto a la marquesita en su apartamento de la calle San Bernardo, y que me levanté, como de costumbre, muy temprano, a eso de las seis, para salir del edificio antes de que se levantaran los vecinos". Así comienza Aguacero, con sus primeras palabras nos sitúa en la época y nos presenta al protagonista que nos va a contar la historia, el inspector Ernesto Trevejo. Y con estas primeras palabras yo ya quería conocer la historia, conocer mucho más a este inspector que por sus primeras palabras sabía que sería peculiar, que me iba a gustar. Un hombre inteligente, tenaz, y astuto.
Y todo en esta novela me parecía bueno, la trama, el lugar, la época, los personajes, los diálogos, su crítica social... sientes que estas leyendo una novela negra de las clásicas, una novela que la imaginas en cine.
Todos los personajes de Aguacero son importantes, todos son imprescindibles en esta historia, pero quiero destacar la pareja formada por nuestro protagonista, Ernesto Trevejo, y Aparecido, agente de la Guardia Civil que se le asignará a Ernesto para que le ayude en la investigación. La pareja, sus diálogos y su relación me han fascinado. Dos personas muy diferentes y perfectamente encajados en la historia y en la época.
La novela está narrada con un estilo ágil, rápido y muy cuidado. Todo sucede en tres días, tres días oscuros, tres días con aguaceros, tres días cargados de acontecimientos, tres días donde la intriga no desaparece hasta el final.
Finalmente quiero reflejar la importancia de los diálogos en la novela, aparte de contribuir al buen ritmo narrativo nos muestran magistralmente la realidad de todos los personajes involucrados en el caso. Diálogos brillantes.
Ya no puedo contaros más, tenéis que leer la novela y compartir vuestras sensaciones en mi blog, yo os digo que estoy feliz de haber conocido a un joven autor de novela negra, un gran descubrimiento. Espero sus siguientes obras con entusiasmo.
Luis Roso(Moraleja, Cáceres, 1988) es licenciado en Filología Hispánica por la Universidad de Salamanca, en Filología Inglesa por la Universidad Autónoma de Barcelona y posee un máster en Literatura Española e Hispanoamericana.
Apasionado de la literatura, la historia, el cine y el deporte, actualmente trabaja como profesor de secundaria en la Comunidad de Madrid. Admira a Delibes, Cela, Ferlosio, Sender, Barea y Martín Santos.Aguacero es su primera novela. Aquí tenéis su página web http://luisroso.com/
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