Dorian Wilson es uno de los mejores y más famosos creadores de videojuegos, pero en los últimos tiempos ha perdido su toque mágico... Su empresa le da un ultimátum: o consigue un nuevo éxito o le despiden. Para ayudarle a centrarse y sacar adelante el proyecto, le envían a Claire Redfern, experta en encauzar la creatividad de genios como él. En el día a día, Dorian y Claire tendrán que aprender a trabajar juntos, a estudiarse, a cooperar... hasta que el amor parece querer entrar a complicarlo todo. Tanto uno como otro deberán enfrentarse a su pasado, a superar antiguas traiciones y engaños, todo para poder sacar adelante su proyecto. Y algo más... Mientras tanto, todo estará en juego.
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Amor en juego de Marta Cruces me ha sumergido en un mundo no completamente desconocido, pero si en el que no suelo moverme habitualmente. Por lo tanto, durante su lectura he conocido los tejemanejes de una profesión tan compleja y fascinante como es el diseño de videojuegos, algo que tal vez a simple vista parece un trabajo divertido y falto de dificultades, sin embargo, con este libro hemos visto que no es así, quedando claro todo el esfuerzo que conlleva y la belleza que esconde crearlo. Así pues, con una narración distendida y fresca he conocido a un dispar grupo de personajes con gran talento que revelar que han sabido hechizarme con su ingenio y su fortaleza a la hora de sacar adelante sus sueños dejando aflorar su pasión sin importar las trabas o sin sabores encontrados por el camino.
Dorian Wilson es un genio. Desde joven ha amado dibujar, expresar a través de sus diseños historias que sabían cautivar a todo aquel que las veía. Con lo cual, tras años de mucho esfuerzo ha acabado siendo la estrella de la empresa de videojuegos Lunz Entertaiment, un salto a la fama que le hizo sacar a la luz impresionantes trabajos, no obstante, desde hace un tiempo se siente vacío, la inspiración ha desaparecido y la presión de los de arriba para que les presente algún proyecto no le ayuda a la hora de retomar la confianza perdida después de la dura traición sufrida. Así pues, tras no ofrecer a los directivos nada con lo que poder respaldar la ausencia de ideas o su posición como el mejor desarrollador de videojuegos, estos no van a dudar a la hora de contratar a alguien que encauce su vida y su trabajo con el claro fin de presentar en el plazo de unos meses un nuevo juego, algo que no le hará gracia, pero que finalmente traerá, tanto a él como a su equipo, el equilibrio que tanto necesitaban.
Claire Redfern se dedica a organizar el trabajo de otros. Su misión en conseguir que una empresa salga adelante dándole orden a su método de trabajo y si es necesario también al lugar donde se lleva a cabo. Con este objetivo es contratada por Lunz Entertaiment, lo que la arrastrará hasta un mundo del que sabe bien poco y las referencias que tiene son a través de su hermano menor, Chris, un apasionado de los videojuegos, un proyecto complicado que la obligará a sacar todo su talento a flote ante lo que se le viene encima. Sin embargo, cuando conoce a su nuevo jefe y a su brillante equipo descubre a un grupo bien avenido que solo necesita un pequeño empuje que los haga retomar la confianza e ilusión por la labor que llevan a cabo, algo sencillo que la afectará más que otros encargos.
De esta manera, Claire y Dorian tendrán un encuentro que despertará la atracción y el deseo mutuo, un flechazo en toda regla que planeará sobre sus cabezas a lo largo de toda su colaboración. No obstante, aunque se ve claramente que sienten algo, Dorian huirá del amor y del dolor que este sentimiento puede acarrear, por lo que, tras un acercamiento tan explosivo volverán a la casilla de salida cerrando las puertas a un posible romance. Con lo cual, mantendrán una relación puramente profesional con una fuerte tensión que soportar, llena de anhelo y deseo, haciendo por lo tanto que se centren en sacar adelante el nuevo proyecto, el cual solo florecerá una vez que el joven genio recupere la inspiración y olvide el pasado, algo que será posible gracias a los cambios llevados a cabo por Claire, pero sobre todo al apoyo que ésta le está ofreciendo logrando que su autoestima se alce dando de lado todo el sufrimiento que lo ha llevado al pozo oscuro en el que se hallaba. Así pues, Dorian junto a todo su equipo comenzarán la creación de un deslumbrante trabajo cargado de ingenio, chispa y por supuesto totalmente innovador, un camino cargado de pruebas que superarán con nota dejando claro el gran equipo que son. Asimismo, la cercanía entre este par de enamorados será determinante para sus emociones, permitiéndoles aclarar toda la confusión que sienten y encauzando a su vez tanto su vida profesional como personal, elementos claves para abrazar la dicha que el destino siempre les había ofrecido.
Marta Cruces nos presenta una historia cargada de retos y de superación, con personajes fuertes y carismáticos que han conseguido mostrar una realidad llena de buenas personas, pero también de gente traicionera y envidiosa capaz de todo por ser los mejores. De esta manera, la trama nos acompaña a vivir en primera persona el hundimiento de un gran genio y el resurgir de éste con más valentía y arrojo, dos momentos que desvelarán la madurez de Dorian y como esta llega hasta todo su equipo, incluso a Claire, una mujer fuerte e independiente con mucho que aportar que estaba anclada por las circunstancias que rodeaban su vida. Así pues, nuestros héroes serán completamente opuestos, parecen no tener nada en común, pero solo hará falta una primera mirada para que la conexión sea inmediata, tal vez muy rápida para mi gusto, lo que me chocó y me dejó descolocada, sin embargo, tras ciertos sucesos, Dorian dará un paso atrás, dejando este instalove en el aire para ver cómo va floreciendo con más calma. Todo esto ha sido extraño, pues su historia llega en ciertos momentos a estar suspendida, centrándose en sus líos mentales o profesionales, no obstante, es esto mismo lo que hace que se terminen conociendo mejor consiguiendo que sus sentimientos al finalizar la obra sean más fuertes y duraderos, con lo cual, aunque me descolocó ese ir y venir, era preciso para el propio avance del romance. Junto a lo ya dicho, solo queda destacar la parte estrella de la trama, el videojuego, a lo largo de la lectura conoceremos como surge, su creación, la metodología que sigue y los pasos para que vea la luz, además también conoceremos los inconvenientes que van apareciendo o toda la publicidad que necesita para salir a flote, todo un conjunto de directrices que me ha dejado sorprendida y alucinada descubriendo así la magia de los diseños gráficos, un mundo lleno de ilusión y fantasía. Finalmente, mencionar la prosa encontrada, fresca, ágil y sobre todo sencilla, logrando una lectura rápida y adictiva perfecta para desconectar y relajarte en estas tardes tan primaverales.
Amor en juego de Marta Cruces nos cuenta una historia llena de sentimiento, donde el corazón humano nos revela lo mejor y lo peor de las personas, logrando que dos desconocidos curen sus almas y alcancen sus más profundos sueños, recuperando la confianza perdida y la valentía para brillar con luz propia.