CEGADOS
Título: Cegados.
Autor: Fran Sánchez (Almería 1966) durante mucho tiempo ha trabajado en diversos cometidos y empresas. Residió siete años en Tenerife, aunque en la actualidad vive en Almería. Muy aficionado a las series de televisión, al cine y a la informática. Lector empedernido que se atreve con la novela y el relato. Las antologías de relatos Y de repente...abrí los ojos y Descubriendo Historias I, además de Cegados son su carta de presentación a los lectores.
Editorial: Círculo Rojo.
Idioma: castellano.
Sinopsis: una gran catástrofe asola a la humanidad, una erupción solar deja repentinamente ciega a la mayoría de la población. Solo unos pocos escapan de la situación. Nuestra forma de vida y nuestras rutinas diarias desaparecen, todos estamos obligados al cambio Hay que elegir una postura moral y ética, mientras unos aprovechan su situación de superioridad para sus intereses personales, otros se vuelcan en la ayuda desinteresada a los demás. Entre éstos últimos un ciego de nacimiento, vendedor de cupones, resulta vital para adaptar y mejorar la vida de videntes e invidentes, junto a un vigilante de seguridad, héroe innato ¿Cuál sería tu opción? Si no te decides, simplemente cierra los ojos.
Su lectura me ha parecido: original, interesante, reflexivo a ratos, puntualmente lúcido, directo, demasiado ágil...Queridos lectores y lectoras, a nadie se nos escapa que actualmente la novela de ciencia ficción post apocalíptica está más de moda que nunca. Esto se puede deber a muchos factores, desde el auge de la posverdad en ámbitos tan importantes como la política o la economía, hasta el hecho de que las nuevas tecnologías han obligado a la humanidad a ir más rápido, vivir de forma frenética, hacia un futuro incierto pero lleno de problemas a los que tendremos que hacer frente. Ese futuro, desde el ámbito de la literatura, se ha imaginado de muchas formas, desde una situación post holocausto nuclear, pasando por la posibilidad de gobiernos autoritarios cuyas técnicas de control y represión nadie quiere sufrir. También existen, por descontado, autores y autoras que puestos a arriesgar, nos hablan de acontecimientos inmediatos, posibilidades terribles que condicionan la vida en el presente de forma absolutamente abrumadora. En este espacio hemos reseñado algunos libros que se ajustan a estos formatos o temáticas, tales como La carretera de Cormac McCarthy o El mecanoscrit del segon origen de Manuel de Pedrolo, lecturas imprescindibles para el amante del genero. La novela que hoy os presento tiene un poco de las dos sin llegar a superarlas en talento, no procede del ámbito del best seller, como tampoco a los de culto. Sin embargo, no podemos obviar su existencia y la sorprendente originalidad de su trama. Desde la pluma de un escritor español novel, nos adentramos en Cegados: luces y sombras en lo que pretende ser el inicio de una historia con muchas continuaciones.
La historia de como Cegados llegó a mis manos fue sencilla. Un día, mientras realizaba la rutinaria tarea de actualizar mi correo electrónico, me topo de pronto con un mensaje. Quien me escribía era Fran Sánchez, un escritor novel quien me presentaba su novela, titulada Cegados. Antes de continuar, he de confesar que hacía tiempo que no recibía un correo de estas características, es decir, ya había pasado unos meses desde que hiciese la última reseña de un autor/a novel. Y no por falta de ellos, pues lo cierto es que me llegaron algunos correos antes del de Fran, sin embargo, ninguno de ellos me presentaba una historia lo suficientemente atrayente como para que finalmente decidiese leerla, y posteriormente, reseñarla en mi espacio. Esta situación siguió así hasta que el menaje de Fran llegó casi como agua de mayo. Por fin algo en apariencia original y del que se podía extraer algo interesante. Invadida por el entusiasmo y tras leer una interesante sinopsis, decidí ponerme en contacto con él para comunicarle que iba a leer su libro. Esto fue lo que pasó, sin embargo, la lectura de Cegados se atrasó más de lo que hubiese querido. Problemas personales, falta de tiempo, urgencia de algunas reseñas para las editoriales... Todo ello provocó que el proceso de lectura de esta novela estuviese un poco lejos. Finalmente, y con la sensación de estar quedando fatal ante Fran, pude por fin ponerme delante del libro y comenzar a leerlo. Tras una lectura que me retuvo menos tiempo del que hubiese imaginado, llegué a la conclusión de que había por un lado merecido la pena, y por el otro, me invadió la sensación de que me hallaba ante una novela que pedía más, un capítulo más, unas páginas más...En definitiva, una necesaria continuación.
En lo que respecta a la crítica puramente personal, comenzaremos por lo más evidente. Cegados presenta una lectura trepidante, ágil, rápida, demasiado rápida, veloz sería la palabra que más se le ajustaría. Yo no digo que no esté mal encontrarte con una lectura cuya lectura se te pase volando, es más, en ciertos momentos de la vida se agradece y se necesita de vez en cuando desconectar de libros densos y monótonos. Sin embargo, esa extraordinaria rapidez en el ritmo y en la narración en ocasiones pueden resultar un poco contraproducentes. No obstante, y esto hay que destacarlo, en 110 páginas el autor logra crear un clima, una situación y unos personajes que invitan a la inquietud y a una ligera meditación, acortada eso si, por el frenético ritmo de la novela. En lo que respecta a la historia, a su núcleo principal, he de reconocer que Cegados plantea una cosa a priori sencilla, pero que literariamente, da mucho juego. Soy muy fan de que los escritores y escritoras partan de acontecimientos inesperados y enormemente condicionantes, del "¿qué pasaría si...?" Esto obliga a que el lector estimule la imaginación y a que al finalizar su lectura, no pueda evitar hacerse preguntas. Con Cegados me pasó eso, aunque no con la misma intensidad que con otras novelas del género. Sin embargo, hay que reconocer que la premisa es absolutamente impactante, lo que da pie a que se lea con más interés. Seguidamente, en lo que respecta a los personajes, he encontrado que son bastante comunes, en el sentido de que te los puedes encontrar o cruzártelos por la calle sin ningún problema. Sin embargo, Fran Sánchez logra imprimirles un toque distintivo que los saca ligeramente del entorno anodino y los vuelve interesantes y literarios en cierto sentido. No serán personajes que pasen a la historia, pero la verdad es que probablemente, en cuanto los veamos evolucionar más, tal vez podamos conocerlos un poco más. Por último, sólo comentar que el final de Cegados es demasiado abierto, tanto que el lector se da cuenta al instante de que el autor tiene pensado escribir una segunda entrega. Eso se nota, pero, y esto es una cuestión puramente personal, y aunque caigo rendida ante este tipo de finales, no me ha acabado de gustar que estuviese tan, tan abierto. Por lo demás, y a modo de recapitulación, nos encontramos ante una novela de corte especulativo, con un tema realmente original pero que le falta un poco de rodaje y de experiencia. De todas formas se nota que hay un gran escritor detrás, así que tiempo al tiempo.
Adentrándonos en terreno más reflexivo, tratándose de esta novela, es inevitable, por no decir imposible, no mencionar y debatir entorno a el tema principal que se respira a lo largo de este libro. Cegados, indudablemente, es, como ya hemos comentado antes, una novela especulativa, y como tal, cuestiona a partir de un acontecimiento inesperado, que este caso es una erupción solar que produce ceguera a un alto porcentaje de la población, las diferentes manifestaciones del ser humano. En otras palabras, ahondar en los entresijos de la famosa condición humana. Esto, por descontado, no es para nada novedoso, muchos escritores abordaron este debate con anterioridad, sin ir más lejos, en Sin novedad en el frente, Erich Maria Remarque ya mostraba como el ser humano se muestra tal y como es frente a una situación tan traumática como puede ser el frente durante la I Guerra Mundial. Esto podría resumirse en "Si quieres conocer mejor a las personas, monta una guerra", una frase que no recuerdo exactamente donde la leí, pero que refleja muy bien la temática que Cegados, al igual que Sin novedad en el frente, comparten. Cuando uno se introduce en la lectura de un libro de estas características, es inevitable, por no decir imposible no ponerse en la piel de los protagonistas, observarlos desde una distancia prudencial, si, pero siendo testigo de como la miseria del ser humano aflora de entre los recovecos de las diferentes personalidades. Cada uno de nosotros reacciona diferente a una situación de este tipo, a unos les podrá la cobardía, a otros les infundirá valor, algunos dejarán al descubierto su faceta más rastrera, y por el contrario, habrá quien se muestre solidario y ayude desinteresadamente al que más lo necesita. Normal que tras cualquier conflicto o catástrofe, nada vuelve a ser como antes, las relaciones sociales cambian, pues, ya sabemos como es el vecino, la amiga, la compañera de trabajo, el hermano, el padre, la madre, la pareja...Ya sabemos como es en realidad y no en apariencia. En Cegados, esa sensación está presente, tanto, que incluso llegas a preguntarte cómo actuarías tu, lector, si de pronto, de la noche a la mañana, se produce una catástrofe de proporciones extremas. Es un terreno bastante explotado y que llega incluso a ser filosófico, sin embargo, no está de mas que de vez en cuando novelas como Cegados nos lo recuerden una vez más. Cegados: una historia de solidaridad, miedo, ayuda, compañerismo, historias personales, experiencia...Una novela que promete y de la que esperamos una más que merecida continuación.
Frases o párrafos favoritos:
"Roberto resultó ser presa fácil para la famélica jauría de perros ciegos que contaban con ventaja gracias a su desarrollado olfato y finísimo oído. El líder de la mandada le asestó un mordisco en el cuello, sus colmillos seccionaron la yugular y un caño de sangre a borbotones regó el lugar. La jauría babeaba ansiosa por darse un festín."
Película/Canción: aquí os dejo con el booktrailer de Cegados:
¡Un saludo y a seguir leyendo!