Mia Fredricksen tiene una vida perfecta al lado de su marido Boris. Da clase de Poesía en una universidad y tiene varios libros publicados. Su hija está estudiante para ser actriz y mantiene una relación amistosa con su madre. Pero un buen día Boris la pide que se tomen un tiempo (una pausa). Tiene una relación con una compañera más joven de departamento y necesita saber qué hacer con su vida.
Este el detonante que hace que el mundo de Mia se derrumbe. La angustia alcanza tales cotas que tiene que ser ingresada en un sanatorio mental, recomponiéndose y arreglando su vida. Sin embargo, lo más difícil no será la estancia, sino la vida que hay después, sin su marido y con una excedencia del trabajo por motivos de salud.
¿Cómo volver a ser una misma con la mente quebrada? Mia vuelve a Sonden, el pueblo donde está la residencia de su madre. Allí conocerá a varias ancianas que se relacionan con ellas y cómo cada una luchó su propia vida a su manera. Hace amistad con su vecina, una joven con dos niños a la que su marido grita cuando tiene un mal día. También dirigirá un taller de poesía destinado a adolescentes donde comprobará las estrictas reglas sociales que tienen las niñas.
De esta forma, pasado, presente y futuro se dan la mano en ese verano de Mia, en ese verano sin hombres, donde a pesar de toda su actividad, por las noches no podrá evitar preguntarse por su todavía marido, si sigue con su relación y si piensa volver algún día.
La novela tiene gran cantidad de elementos autobiográficos. La propia Siri es esposa de un hombre brillante y tiene una hija cantante. Reflexiona cuál es el papel de las mujeres en el mundo, si el de hija, esposa y madre o si tenemos algo más que ofrecer a los demás. Habla de la creación, de cuál es el papel creativo de las madres. Y no en vano su libro está lleno de mujeres creativas: ella es poeta, una de las ancianas borda con primor, su vecina hace pendientes de metal y su propia hija es una estudiante talentosa.
De esta forma, la pausa de Boris va quedando en un segundo plano a medida que Mia avance en su autoconocimiento en todos los niveles de su vida, dando lugar a una novela intimista y también algo perturbadora.