Mi ebook de “La casa de los siete tejados” de Nathaniel Hawthorne
Nathaniel Hawthorne es un escritor que me cautivó con “La letra escarlata” y ha vuelto a dejarme con muy buen sabor de boca con “La casa de los siete tejados”. No descarto seguir buscando las obras de este autor cuyo estilo me encanta, pero por el momento vamos a centrarnos en mi última lectura, porque ha merecido mucho la pena.
“La casa de los siete tejados” cuenta la historia de la familia Pyncheon, la cual arrastra una especie de maldición desde que uno de sus antepasados, el coronel Pyncheon, arrebatara los terrenos sobre los que se alza la mansión familiar a un humilde campesino acusado de brujería y ejecutado por ello. Todos los miembros de esta familia parecen sufrir de una forma u otra por esta maldición, hasta llegar a los descendientes en el siglo XIX, entre los que se encuentra la actual habitante de la conocida como casa de los siete tejados (debido a esta singularidad arquitectónica) una dama soltera que vive encerrada y que, movida por la necesidad de ganar dinero, decide salir de su burbuja abriendo en una de las estancias de su mansión una tienda de comestibles. La anciana pronto recibe la visita de una joven pariente, Phoebe, quien supone un soplo de aire fresco en su retiro debido a la bondad y alegría que destila la muchacha y a su inestimable ayuda a la hora de hacer prosperar el nuevo negocio, así como su colaboración para mejorar la salud del enfermo hermano que ahora acompaña también a la dama. La aparente serenidad en la que viven los actuales Pyncheon se ve sin embargo enturbiada por la presencia de otro primo, el juez Jaffrey Pyncheon, vivo retrato del antepasado que provocó la maldición y que parece tener unas oscuras intenciones que el lector conocerá al final de la historia.
Toda la narración está impregnada de un halo de misterio y misticismo que hacen que el lector experimente los efectos de esta añeja maldición, presenciando pasajes tan irreales como fantasmagóricos mezclados con la cotidianeidad de los protagonistas. Hawthorne consigue poner de manifiesto dicha maldición tanto de forma física como espiritual en los distintos familiares, de la cual únicamente parece librarse la joven Phoebe, aunque tampoco este personaje tarda en perder parte de su candor e inocencia después de pasar unos meses tras las paredes de la casa de los siete tejados.
El ritmo de este libro es ligero y el estilo narrativo verdaderamente cautivador. Hawthorne incluso se permite la licencia de incluir al lector en el relato de una forma muy peculiar, saliendo como narrador de la historia y situándose desde fuera, como mero espectador de lo que está ocurriendo, sobre todo en una escena que me ha parecido magistral y sobre la que no puedo revelar nada porque está casi al final del libro, pero en la cual el juez Pyncheon es el protagonista de una manera muy curiosa…
Recomiendo encarecidamente la lectura de “la casa de los siete tejados” sobre todo si disfrutas de las historias decimonónicas y, como a mí, te encanta el misterio y la temática de casas encantadas. Por supuesto, tampoco debes dejar de leer “La letra escarlata” (si no lo has hecho ya). Como comentaba al principio, yo seguiré buscando las obras de Nathaniel Hawthorne que me quedan por leer.
Y tú ¿Has leído “La casa de los siete tejados”? ¿Te gusta el estilo de Nathaniel Hawthorne? Cuéntame…