SINOPSIS
El enigmático y atractivo profesor Gabriel Emerson, reconocido especialista en Dante, es un hombre torturado por su pasado y orgulloso del prestigio que ha conseguido, aunque también es consciente de que es un imán para el pecado y, en especial, para la lujuria. El infierno de Gabriel es una novela profunda y sugerente, llena de intriga, seducción y perdón. Con ingenio y sarcasmo, el autor cuenta la odisea de Gabriel a través de su particular infierno de tentación y amor prohibido. Cuando la virtuosa señorita Mitchell se matricula en el curso de doctorado que Gabriel imparte en la Universidad de Toronto, la vida de este cambia irrevocablemente. La relación que mantiene con su nueva alumna lo obligará a enfrentarse a sus demonios personales y lo conducirá a una fascinante exploración del sexo, el amor y la redención.
Al diablo con el papeleo… digo, digo que vengache pa’cá mi Profesor, oh, querido Profesor. Les iba a contar que nunca me había gustado un profesor mío pero meeeeentira, a quién no le ha pasado.
La cosa entre la vida real y la ficción de este libro es que la cosa no solo queda en “me gusta mi profesor”, no, no, no, sino qué clase de libro sería este ¿verdad? De modo que conozcamos un poco de Julia/Julianne ya que la historia comienza con ella y aunque gran parte de las escenas estén enfocadas en ella, sólo es un puente para arreglar lo que dentro de Gabriel parece un poco desacomodado por no decir que ha pasado un huracán y lo ha dejado todo mal. Julia también tiene sus conflictos diametralmente alejados de los del Profesor, cada problemática que envuelve a los protagónicos es bastante fuerte y en un inicio Gabriel solo contribuye de una muy mala manera a que Julia se sienta lo bastante mal e incluso les voy a confesar que se me salió la lágrima por la escena donde Gabriel se comporta como un verdadero patán y la humilla.
Mientras avanza la historia Gabriel y Julia tienen que convivir el uno con el otro fuera del ámbito académico más a fuerza que por convicción, o eso parece… ehem… por supuesto que nosotros leyendo la historia desde arriba sabemos que Gabriel es lo bastante obvio con sus intenciones pero admirable el valor para contenerse y tremendamente deseable son los arrebatos de celos que el comienza a demostrar hacia Julia. Esta convivencia forzada pronto se vuelve en una por placer pero claro, como en todo hay baches y unos muy bien hilados a la historia para que ese ritmo de expectación nunca decaiga, de verdad, este libro es sumamente adictivo.
Más para allá que en un inicio, nos revolvemos entre los pasajes y teorías acerca de Dante y lo bien que encajan en la vida de Gabriel o irónico y coincidente de cómo se desarrolla la historia entre ambos personajes, ésta ya es muy avanzada y cada cosa que pasa o te estruja el corazón por las verdades que se van revelando o te pone las mejillas coloradas porque evidentemente estamos hablando de un libro del género erótico, que desde mi punto de vista es perfecto. Gabriel y su modo de engancharte a esta historia con su labia y experiencia en la vida, provoca que básicamente estés como Julia, a la espera de más. Afortunadamente, es un libro con una psicología a tomar con seriedad y ésta no va encaminada a darle al lector un mal mensaje a nivel inconsciente, la historia avanza así como sus personajes, para bien y el de ambos desde luego.
Así que no me queda más que decirles: