Estamos a punto de comenzar las Fiestas, celebraciones con la familia y amigos. Se presuponen felices, sobre todo para los niños, que encarnan la inocencia y la ilusión. Pero no todo son milagros, ni niños felices y contentos. Hay infancias rotas, familias tóxicas, progenitores que maltratan y un largo etcétera cuya violencia recae sobre los niños.
De vez en cuando nos despertamos y asistimos sobrecogidos a desgracias que recaen sobre los niños: algunos se ahogan en el Mediterráneo, otros son secuestrados y asesinados por su padre, otros son secuestrados y nunca volvemos a saber de ellos. Es terrible, sí. Pero más terrible todavía es pensar que se trata solamente de la punta del iceberg. Que hay niños que van al colegio con moretones escondidos, o con los ojos llenos de lágrimas. Niños que no se atreven a poner en conocimiento de nadie lo que ocurre en sus hogares porque el miedo a las consecuencias es mucho mayor.
Todo esto y más aparece en Profanación (Luz Negra). Amparo Montejano ha querido dar voz a las desgracias y a las verdaderas tragedias que sufren en silencio todos los días muchos niños y niñas a la sombra de su árbol familiar. El padre que se quita el cinturón y se lía a golpes puede parecer del siglo pasado, pero es algo que sigue ocurriendo, sólo que ha cambiado el método. El silencio, la humillación, la bofetada... son constantes en nuestro día a día.
Y esos pobres niños, víctimas no sólo de la violencia familiar o delvecino o en el colegio, es a los que ha querido dar voz la autora de terror, con un estilo decididamente weird que mezcla en ocasiones la realidad llena de detalles con elementos sobrenaturales, los fantasmas con los matratadores de carne y hueso.
En resumen, se ha echado sobre la espalda la titánica tarea de dar voz a aquellos que no tienen, bien porque tienen miendo de denunciar, bien porque están atrapados por un ejército de niños muertos. No en vano una de las inspiraciones de este libro es Ana María Matute, gran conocedora de los niños, quien en su obra El niño tonto nos acerca a estas realidades.
«Profanación se asemeja más a un bestiario del sufrimiento, de la oscuridad y del infanticidio: se trata de una auténtica arma arrojadiza dispuesta a retirarnos ese velo de ingenuidad acerca del maravilloso mundo que se les presupone a niños y preadolescentes» (Pily Barba).
El libro, aparte de su calidad literaria, tiene varios añadidos que lo hacen todavía más interesante. El primero de ellos es el prólogo de Pily Barba, donde nos adelanta algunas de perlas que vamos a encontrar a lo largo de sus páginas. También el epílogo de José Montejano, donde nos ofrece algunas claves para comprender mejor los relatos y llegar al fondo de la crueldad. Y por supuesto, sus maravillosas ilustraciones.
Sólo me queda destacar que Amparo es la directora de la revista online El Círculo de Lovecraft, donde se tratan temas relacionados con el Maestro de Providence y autores afines.