Reseña ➢ De repente en lo profundo del bosque - Amos Oz

Nombre original: Pit'om be'omek haya'ar
Autor: Amos Oz
Páginas: 118
Editoria: CFE

Sinopsis:Una noche, hace muchos años, cuando los habitantes adultos de la aldea todavía eran niños, desaparecieron de ella todos los animales y nunca los volvieron a ver. Maya y Mati, dos niños que guardan un secreto que los aleja de los demás, deciden internarse en el bosque para descubrir la verdad sobre la desaparición de los animales y sobre el espíritu de Nehi. Su viaje puede leerse de varias maneras: como una leyenda moderna, como una fabula sobre el destino y la intolerancia a como una crítica a los relatos históricos que ofuscan la realidad.

Reseña
Erase una vez un niño que vivía en un pueblo ubicado en algún lugar entre el espacio y tiempo del universo.

Nimi, el chico a quien me refiero, iba como todos los niños de su pueblo al colegio. Nimi tenía una profesora que siempre les hablaba de los animales. Les colocaba fotografías por el salón, los incentivaba a dibujarlos, les enseñaba los sonidos que estos emitían. Sin embargo los niños se reían de ella ¿ y por qué? porque los animales no existían, que ridiculez. ¿Qué eran los animales? ¿gatos? ¿perros? ¿peces? ¿pájaros? ¡por favor! mitos -decían-, cuentos que se escabulleron de boca en boca para asustar a los niños ¿y qué es eso del demonio Nehi? pff, ¡son niños grandes!Nuestro aparente personaje principal creía, como los niños perdidos en las hadas, en los animales. Tenía una obsesión con esos seres que en su vida había visto además que en una fotografía, pues en este lugar escondido de la realidad una maldición acechaba a lo salvaje. Ningún insecto, ningún ave, ni cuadrúpedo ni bípedo, atravesaba el lugar y los niños, en grupo, se reían del pequeño Nimi por atreverse a creer en ellos.A veces llegaba contando historias que su imaginación elaboraba, y nadie perdía la oportunidad de burlarse de su ingenio, aunque a él poco le importaba.A pesar de eso, habían dos jóvenes que se negaban a creer la inexistencia de los animales. A Maya y Mati los unía una muy fuerte amistad, y tenían un secreto que provocaba su resistencia al tema. ¿Si te cuento el secreto, te animas a leer el libro? No lo creo, mejor lo dejamos así.

Sin todos lo seres vivos, hasta las noches más claras de verano le parecían a veces como cubiertas por una niebla turbia, una niebla que lo invadía todo y que casi enterraba debajo el pueblo, el corazón y el bosque.

Como si yo no tuviera una enorme lista de libros por leer, aquel día de escuela, como otro cualquiera, pasé discretamente por la biblioteca y decidí coger un libro relativamente al azar, y digo relativa pues para mi este asunto no es tan al azar, aunque tampoco cumple con margenes establecidos. En fin, la cosita era corta y se veía interesante así que me lo leí en tres días -algo vergonzoso por cierto teniendo en cuenta su poca cantidad de páginas- pero no estoy pasando por un buen momento en mi vida como lectora, así que: ¡yay Azul, todo un record!El libro, como ya mencioné antes, es bastante breve y rápido de leer. Posee capítulos cortos y la narración algo infantil hace parecer a la trama del mismo género, aunque la historia que oculta tras las letras no lo es en absoluto.El gran rollo aquí es el mito de los animales. Los niños nunca han visto alguno y cada vez que cuestionan eso a sus padres ellos les responden con evasivas o los castigan, aunque a veces son ellos mismos quienes evocan el recuerdo. Hay gente del pueblo que aun cree que volverán, como la maestra, la madre de Maya que deja migas de pan en el suelo para que los pájaros coman, el viejo pescador que llama a su perro o se sienta frente al río con su vieja caña... entre otros pocos.Algo paso, y nuestros protagonistas van averiguar que fue.El narrador es omnisciente y viaja entre las perspectivas, de modo que cuesta un poco ubicarse en el protagonista o en el hilo de la historia hasta más o menos la mitad, la cual, teniendo en cuenta el grosor del libro, es muy cercana al inicio.El tema principal que toca, más que ser una especie de fábula, es algo como la discriminación en grupo, o el hacerse pasar por alguien 'malo' aunque en el fondo no sea verdad. Estos niños molestan a Nimi en grupo, pero más de alguno en el fondo de sus corazones cree en sus barbaridades. Molestan a la madre de Maya por esperar a las aves, pero albergan la esperanza de que estas aterricen un día sobre el suelo.El final me dejó gusto a poco y es demasiado abierto, demasiado ambiguo, hasta parece que le faltaron hojas a mi edición y no creo que sea final para una buena historia.En general me gustó, el tema que toca es real y está tratado con cuidado y esmero. Tiene su toque fantastico, surrealista, más allá de la supuesta maldición que invade al pueblo, pero aun así no hay sorpresa de parte de los personajes en ello -no más de la que el autor quiere causar-. Recomendada al que quiera pasar un buen rato, al que quiera viajar a la infancia y al que quiera escaparse a una triste realidad sin más vida que la humana.
Puntuación: 3.5/5