Autor: A. G. Howard
Editorial: Oz Editorial
Trilogía: Susurros, Delirios, Ensnared (aún sin traducción)
Paginas: 416
El País de las Maravillas sólo era el principio…Después de su aventura, Alyssa Gardner trata de olvidar a la vengativa Reina Roja, al atractivo Morfeo y concentrarse en su nueva vida con Jeb. Pero no es tan sencillo: su madre, recién liberada del hospital mental, se comporta de nuevo de manera extraña. Un día Morfeo aparece de nuevo para pedirle que vuelva arriesgarse por el País de las Maravillas, Alyssa comprende que tendrá que contarle la verdad a Jeb, quiera o no.El País de las Maravillas la reconoce como una de los suyos, y si acepta el reto, Alyssa deberá enfrentarse a una batalla mortal, que podría costarle mucho más que la cabeza.
Bueno antes de nada, deciros que esta reseña no la voy a hacer yo, sino mi hermana Marina, debido a que desde hace tiempo le estoy pidiendo que se anime a hacer alguna reseña en mi blog como colaboración. Así que aquí os dejo la opinión de Marina sobre el libro.
¿Habéis visto la puñetera portada....?
Si la de Susurros era perfecta, la de Delirios es adskjknkkjsaadskj. Que Morfeo aparezca, con esa mirada seductora suya, y los preciosos tatuajes que lo señalan como criatura de las profundidades... En fin, que es increíble.
Increíble, al fin y al cabo, es lo que el libro es. Increíble y loco, como montar en una montaña rusa. Cuando crees que es más tranquilo, hay otro looping que te pone cabeza abajo.
La historia empieza un año más o menos desde que lo dejamos en Susurros, y para continuar una bonita tradición, empezamos con Allysa creando otra de sus potentes obras de arte, que jugarán un importantísimo papel en el libro. Seis murales, creados con gemas y su propia sangre, que serán una predicción de lo que está por venir.
La verdad es que la autora nos mantiene en una tensión continua. Jugando con el misterio de si volverán o no a nuestro amado y loquísimo País de las Maravillas. La verdad, es que me pasé todo el libro con un nudo en la garganta, aunque hay tiernos momentos salpicando esas páginas que me relajaron. Momentos entre Allysa y Morfeo, principalmente, que a la vez son terribles y maravillosos, y te dejan un sabor agridulce en la boca. El tira y afloja de ambos personajes es absolutamente genial.
“No sé que es más insoportable, que se crea que lo odio por cantidad de veces que se lo he dicho, o lo lejos que eso está de ser cierto”
“...Maravillada por el casi beso de un demonio”
Mientras que por otro lado, tenemos a Jeb, un pedazo de pan que empieza a no estar siempre para Allysa. Su evolución a lo largo del libro es importante, ya que le vemos cambiar de actitud, desde su protección hacia su chica, hasta la idea de que él no es suficiente para ella. Y su problemilla de memoria... Bueno, eso dejo que lo descubráis vosotros ;)
“....¿Cómo puede alguien competir con eso?- las lágrimas se amontonan en mis ojos, pero las mantengo a raya- solo un artista. Pintaste mi libertad con tu sangre. Solo un patinador. Volaste por una sima en un monopatín hecho con una bandeja de té para ponerme a salvo. No necesitas magia, Jeb (…) tú te encargaste
de todo lo que nos sucedía, ayudándote del ingenio y valor humanos”
La verdad es que es un libro con una estética maravillosa y recursos muy imaginativos que te hacen temblar, contagiado por la locura del País de las Maravillas. Continúa de forma perfecta el mundo que inició con Susurros, aunque para mí no se podrá superar nunca el primer libro.
Aún así leedlo. Os esperan sorpresas y altibajos, y alguna que otra sorpresilla, una ruptura de esquemas. Aunque claro, tratando del mundo de las profundidades, ¿como no va a ser un libro fuera de lo normal?
Increíble
Y mi puntuación (selene):
Leer sí o sí