Reseña: Diario del viajero

Era un fin de semana como otro cualquiera hasta que, sin previo aviso, todas las cadenas de televisión y emisoras de radio del mundo dejaron de funcionar.

Durante veinticuatro horas solo se emitió un mensaje cíclico y monótono que avisaba a todos los habitantes del planeta que, si nadie ponía remedio, una pandemia estaba a punto de llegar para acabar con la raza humana.

A partir de ese momento comienza una trepidante búsqueda para dar con los culpables que han causado un ataque que las autoridades tachan de broma de mal gusto. El único sospechoso hasta el momento es un joven escritor llamado Santi cuyo libro, publicado varios años antes, relata exactamente todo lo que había sucedido en los últimos días y todos los graves acontecimientos que estaban por llegar.

Según ese libro, un nuevo medicamento lanzado al mercado mutará en algunas personas convirtiéndolas en seres que nada tienen que ver con la raza humana y que en pocos meses, se harán dueños del mundo.

Nada más empezar la investigación el inspector al mando se da cuenta que algo no cuadra, Santi esconde mucho más de lo que cuenta y cuanto más indaga en la vida del joven escritor, más le cuesta creer lo que va averiguando. Nada es lo que parece y nadie es quien dice ser.

Mi opinión

Lo confieso, he contado los minutos que me faltaban para acabar de leer " Diario del viajero ". No, no es lo que algunos de vosotros estáis pensando. La verdad es que mi desespero era fruto de mis ganas de escribir esta reseña y dar mi opinión sobre esta novela de ciencia ficción.

No sé si ya lo he comentado en otras reseñas, pero mi afición a las novelas de ciencia ficción espaciales no son de mis favoritas. Me encantan las películas de ese género, pero como lectora me agobian. Pero, por otro lado, la ciencia ficción sobre viajes en el tiempo o el tema zombie me gustan, digo más, me apasionan. Y con " Diario del viajero " he disfrutado como nunca. ¿Cómo lo puedo decir más claro? Me lo he pasado requetebién desde la primera página hasta la última.

Su autor, Iván Gilabert, ha ideado una trama perfectamente hilvanada y como un perfecto encaje de bolillos consigue entremezclar pasado, presente y futuro; dialogo y narración. Nada sobra en esta novela y sus protagonistas, Santi y Pablo están muy bien construidos. En pocas palabras, una novela para leer de un tirón por apasionante e intrigante. A cada línea quieres saber que pasará a continuación.

No explicaré demasiado sobre la trama, pues creo que es de esas novelas en que lo mejor es ir sin ideas preconcebidas de lo que se va a leer. Únicamente quiero adelantar que es una de las más imaginativas novelas sobre los zombies, o como los llaman aquí, los Zetas. Su razón para la llegada de los Zetas es de las más creíbles que me he encontrado.

Pero la novela no va solamente de zombies. El otro pilar es el viaje en el tiempo. Por algo el título de "Diario del viajero", ¿no? Sin una de las dos hubiese cojeado la novela se habría resentido inevitablemente. Pero Iván Gilabert ha casado las dos de manera que el lector se introduce en la historia suavemente, y la disfruta con la misma suavidad a lo largo de sus 373 páginas.

Así que si te gustan los viajes en el tiempo (Doctor Who, Quantum Leap...) y/o zombies (George A. Romero, Walking Dead...) esta es una opción muy recomendable y a muy bien precio, demasiado para la calidad de la novela.