Robert Galbraith (traducción de Jesús de la Torre Olid)
1º Cormoran Strike
Espasa
544 páginas | 2013
Una joven modelo con problemas emocionales cae desde su balcón de Mayfair en plena noche. Su cuerpo yace en la calle nevada. Todo el mundo asume que ha sido un suicidio, excepto su hermano, que contrata los servicios del investigador privado Cormoran Strike para que se encargue del caso.Veterano de guerra con secuelas físicas y psicológicas, la vida de Strike es un desastre. El encargo le da cierto respiro económico, pero cuanto más profundiza en el complejo mundo de la modelo, más oscuro parece todo y más se acerca Strike a un gran peligro.
Que pertenezco a la denominada generación Harry Potter no es ningún secreto. Me crié viendo todas las películas en el cine y leyendo todos los libros -excepto los dos primeros- durante la semana siguiente a su salida en español, se me escapó la lagrimilla viendo la última película y demás. Creo que estamos casi todos los, o muchos, blogueros en las mismas. Y llevo queriendo leer Una vacante imprevista desde que salió a la venta, aunque no ha podido ser. Es por esto por lo que en cuanto supe que El canto del cuco era suyo quise hacerme con él, y la suerte se puso de mi parte esta vez para que lo hiciera. Y hoy os traigo su correspondiente reseña.
No hay mucho que aportar acerca de la trama de la novela. Una modelo que se suicida, al parecer, por sus problemas psicológicos y mentales y de todo. Un suicidio que se deja ahí porque está claro que la muchacha estaba mal y se tiró por la ventana, ya está, clasificado y adiós muy buenas. Un detective privado en declive personal y profesional que recibe el encargo, por parte del hermano de dicha modelo, de investigar su muerte porque oye, me parece muy raro que se suicidase. El detective investiga. El detective encuentra -o igual no, eso ya lo veréis-. El arco argumental es ese y ya está, ya no hay más, y a Rowling/Galbraith le da para llenar más de cuatrocientas páginas sin que dé sensación de tedio y sin que aburra, consiguiendo algo que es difícil: aunar una trama correcta con unos personajes agradables. Por otro lado también tenemos los problemas personales de los que sufren Cormoran Strike -el investigador- y su nueva ayudante, Robin -y sí, el nefasto chiste acerca de que son Batman y Robin se hace en la novela, no hace falta que lo penséis-. Unos problemas que solo llegan a vislumbrarse un poco, sin deslucir la trama policiaca que al fin y al cabo es lo importante y lo que destaca; sí que se menciona un poco de cada cosa en cada capítulo. Bueno, ahora que me paro a pensar son bastante más imponentes los problemas de Strike que los de la muchacha, recién prometida y fresca como una lechuguita, pero qué se le va a hacer, a esa petarda tenemos que soportarla porque no hay otra. El combinado que hacen ambos personajes está muy bien, eso sí, conectan muy bien y se agradece tanto que no haya una historia de amor ridícula metida a calzador que quiero aplaudir. De verdad que lo que más curioso me parece es el hecho de que no me haya aburrido para nada habiendo tenido el problema que os contaré más adelante, pero lo cierto es que tiene un ritmo muy ágil y no me extraña que a todo el mundo le parezca tan entretenido (sí, haters, incluso antes de saber que Rowling era la verdadera autora. A ver si va a ser que escribe bien, o qué).
Por otro lado, el personaje principal es el arquetípico de novela policiaca (y ahora meto la gamba porque no soy ninguna experta, así que voy a cambiar eso), el típico personaje torturado, perdón. Veterano de guerra y con una pierna de menos, recién salido de una relación de lo más destructiva, con un trabajo hecho unos zorros... vamos, que es uno más. Y sin embargo tiene unas características interesantes, como que sea hijo de una groupie y un cantante -la cosa tiene su encanto- que le hacen especial, y cae bien al lector, o a mí, algo muy difícil, que me llevo fatal con la mitad de los protagonistas literarios. Quizás lo que más me ha molestado del libro -quitad el quizás- es que sin pecar de ser poco entretenido, porque lo es, en ningún momento aburre y es una historia bastante amena a mi entender, me sentía un poco tonta. Decía Yaya C. (Agatha Christie para la gente de a pie normal) que el detective nunca debía saber mucho más que el lector, y si lo sabe, que dude, al menos. Y el problema que me he encontrado en El canto del cuco es que no sabemos nada. Claro, partimos de la base de que parece que ha sido un suicidio, con lo que a priori no hay ningún dato que nos dirija a ningún personaje, solo cosas subjetivas y aportes de otros personajes. Nada nos orienta a una teoría mínimamente plausible más que detalles vagos y minucias. Hay un momento del libro en el que Strike ve una cosa y dice algo así como "comprendió algo que le llevaba atormentando mucho tiempo". Me resulta muy semejante al método que utiliza Conan Doyle en sus libros de Sherlock Holmes: lo sé todo pero lo dejo para dar el golpe de gracia al final. Pero claro, nadie es tan irritantemente genial como Holmes, y eso se nota. No hay en este libro la magia que hay en las novelas del detective inglés. Por otro lado el mundo que utiliza me encanta, las top models, los famosos en general, la droga, los problemas psicológicos y la gente rica que viene de familias tan desestructuradas y jodidas que tiene muy difícil hacer una vida normal. Asimismo se nota que es de una autora que sabe de lo suyo, porque está no solo bien escrito sino bien argumentado, sin flojeras en el hilo y con un final que te deja con una excelente sensación. Así que sí, leeré la segunda parte cuando salga. Y a ver si me hago de una vez con la novela que me queda, que parece mentira que este lo haya leído con tanta ilusión y el otro siga esperando muerto de risa -es muy caro, diré en mi defensa-.
El canto del cuco es una novela policiaca más que recomendable, que si bien cae en un par de tópicos por sus personajes, tiene una trama de lo más entretenida y original que en ningún momento se hace pesada. La base que presenta para resolver el caso, los problemas personajes de los protagonistas y estos mismos se hacen muy amenos y disfrutables, creando un libro que me ha resultado muy agradable de leer y que sin duda recomiendo.