Un chico con el corazón de hielo.Una chica que huye de sí misma.Dos destinos que se cruzan.Heather cree que solo hay tres cosas que sabe hacer: atraer problemas, salir huyendo y correr. Así es como termina en Alaska, en un pequeño pueblo perdido, trabajando de camarera mientras intenta llevar una vida nueva y tranquila. Su único problema es que uno de los dueños del restaurante parece odiarla y que ella nunca antes ha conocido a nadie que despierte tanto su curiosidad. Nilak es reservado, frío y distante, pero Heather puede ver a través de todas las capas tras las que se esconde y sabe que en ocasiones hay recuerdos que pesan demasiado; como los de sus propios errores, esos que intenta dejar atrás.Pero, a veces, la vida te da una segunda oportunidad.La nieve empieza a derretirse.Y todo encaja.
Este libro lo compré en una oferta super contenta ya que generalmente lo había visto arriba de los $300 MXN ($15 dllrs); la felicidad me duró muy poco cuando comencé a verlo en tops de "Libros que te harán llorar" [para los que ya son veteranos en mis reseñas saben que yo huyo activamente a este masoquismo extremo que mucha gente ama con locura y pasión (espero que no sea contagioso porque hablo con mucha gente así XD)] y para acabarla de amolar una amiga me dijo que la parejita de este libro salía en un pequeño cameo de "13 Locuras que regalarte" (Que también conseguí en esta promo 😎) por lo que a todo lo anterior le vino este "deber lector" maníaco que tengo que me impide leer los libros si no son en orden para poder captar todas estas pequeñas (DIMINUTAS) referencias, pero que me quitan las ganas de leer
Este libro me terminó gustando bastante a pesar de que en un principio ni siquiera estaba logrando mantenerme entretenida.
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La protagonista es una chica que en primera instancia no me terminaba de caer bien, era bastante sangrona y selectiva a la hora de no serlo. Incluso en algunos pedazos me pareció la típica chica que es super antipática pero que por alguna razón le termina cayendo bien a todo el mundo (excepto al protagonista, obviamente *guiño, guiño*); pero que conforme fui avanzando en las páginasA la hora de la hora, siento que la manera en la que se resuelven las cosas queda bastante bien, pero que en un inicio no me parecía lo mejor... pero que puedo decir, me han terminado ganando.
El romance es de esos que se cocinan a fuego lento, donde los pequeños detalles son un mundo y que nos enseña que hay que dar una segunda oportunidad a nosotros mismos.
Y con lo anterior me gustaría darle pie al hecho de que siento que este libro está tanto enfocado en ser un libro de romance como el ser un libro con mucha introspección, y que en algunos momentos el auto descubrimiento sí que le gana al romance; este punto en particular es algo que me gustó muchísimo, esto no sólo sucede con la protagonista que es la que nos está narrando la historia, sino que sucede con más de un personaje y llena al libro de montañas de sentimientos (que como ya dije, no soy fanática de que me hagan llorar) que lo convierten en una lectura hermosa con intenciones bellísimas.En cuanto a la escritura de la autora, pienso que mientras otros rellenan sus libros de descripciones, Alice Kellen rellena los suyos de pensamientos e introspección. Algo que en mi opinión siento que es tanto bueno como... no tanto. Esto mismo lograba hacerme llorar como a aburrirme bastante, siendo que había varios monólogos internos que me parecían muy lentos e irrelevantes. Pero en fin, es gusto de cada quien; al final del día lo que si puedo decir es que en definitiva no es escritura vacía, incluso hay varias sobrecargas por ahí y eso me encanta.Por último, el libro está dividido entre el presente y el diario de una persona que no conocemos para nada pero que nos llevará por una historia paralela y algo atemporal; esto en mi caso no me estaba gustando mucho, ya que en la primera mitad del libro hacía que me sacara de mood de la historia que esperaba y que quería leer (en mi opinión estos estos recursos desagilizan bastante la lectura, o en mi caso sí que lo hacen), pero que con el paso de las páginas, me fue enganchando hasta el punto en el que quería saber qué estaba pasando y a QUIÉN le estaba pasando. Un recurso que personalmente no me gusta nunca al principio, pero que en esta ocasión me terminó ganando, a pesar que sí, al iniciar me aburría bastante y me daba mucha pereza.En fin, El día que dejó de nevar en Alaska es un libro precioso que te llevará hasta la mitad de la nada, rodeado de emociones y situaciones que harán que tu corazón se apriete cada vez más, rodeado con una serie de personajes secundarios preciosos y que a pesar de sus pocos contras, esta historia terminará robándote el corazón. LA RECOMIENDO.Y sip, ya estamos listos para leer 13 Locuras que regalarte 😎.
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