El escritor Francisco J. Sánchez, publica su última novela “El dios de la ira” en el 2013, una historia en las que aúna sus dos grandes pasiones: la literatura y el cine.
“Siro McGrath perdió a alguien el mismo día en que el cielo lo bautizó con un don extraordinario. Desde entonces ha permanecido en la ciudad como una sombra silenciosa, a la espera del momento oportuno para desatar su venganza. Sin embargo, Siro no imagina que su búsqueda le conducirá a un lugar recóndito donde reina una inquietante presencia.”
La ardilla roja, es un pequeño hotel a los pies de las Rocosas. Es regentado por Pratt, un joven inteligente, perfeccionista y con un don muy particular. Pronto conoceremos lo que se esconde entre las paredes de su hotel, algo oscuro que inunda este pacífico lugar y lo transforma en un espacio de pesadillas.
También conoceremos a Siro, él tiene un secreto, lo descubrió un día de lluvia, y a veces no le deja dormir. Por fin ha encontrado a alguien con quien compartir su solitaria vida. Tendrá que luchar para aceptar esa fuerza que habita en él y el hecho de que es diferente a todos los demás, para poder vivir en paz.
Esta historia comienza con Mr. Blonde, un asesino en serie, minucioso, que cada vez que se decide a actuar, asesina a una pareja; ya ha matado a una chica ahora le toca buscar a su próxima víctima: un chico. Poco a poco vemos como las historias de Pratt y Siro van convergiendo; el escritor va encajando todas las piezas de manera magnífica, es una de las partes con las que más he disfrutado, esa manera de ir tirando del hilo hasta que todo se desenrolla.
Esta es una historia de héroes y villanos, cada uno de ellos con un único propósito en la vida y harán lo que sea por conseguirlo. Es una historia corta, más bien diríamos que es un relato, aunque no necesita de más para perturbarnos. El punto fuerte sin duda son sus personajes, no habría uno si el otro, como dos caras de una misma moneda.
El proyector se ha puesto en marcha; ya tenemos las palomitas agarradas fuertemente entre las manos, para poder disfrutar de esta película convertida en novela. En ella se nos presenta la eterna batalla entre el bien y el mal y su intento de encontrar el equilibrio. Una historia con un gran elenco de villanos, pero también algún que otro héroe, en los que el sentimiento que predomina es la ira. Es una historia entretenida, que se lee rápidamente.
¿Y no es el bien la ausencia del mal?
“Siro McGrath perdió a alguien el mismo día en que el cielo lo bautizó con un don extraordinario. Desde entonces ha permanecido en la ciudad como una sombra silenciosa, a la espera del momento oportuno para desatar su venganza. Sin embargo, Siro no imagina que su búsqueda le conducirá a un lugar recóndito donde reina una inquietante presencia.”
La ardilla roja, es un pequeño hotel a los pies de las Rocosas. Es regentado por Pratt, un joven inteligente, perfeccionista y con un don muy particular. Pronto conoceremos lo que se esconde entre las paredes de su hotel, algo oscuro que inunda este pacífico lugar y lo transforma en un espacio de pesadillas.
También conoceremos a Siro, él tiene un secreto, lo descubrió un día de lluvia, y a veces no le deja dormir. Por fin ha encontrado a alguien con quien compartir su solitaria vida. Tendrá que luchar para aceptar esa fuerza que habita en él y el hecho de que es diferente a todos los demás, para poder vivir en paz.
Esta historia comienza con Mr. Blonde, un asesino en serie, minucioso, que cada vez que se decide a actuar, asesina a una pareja; ya ha matado a una chica ahora le toca buscar a su próxima víctima: un chico. Poco a poco vemos como las historias de Pratt y Siro van convergiendo; el escritor va encajando todas las piezas de manera magnífica, es una de las partes con las que más he disfrutado, esa manera de ir tirando del hilo hasta que todo se desenrolla.
Esta es una historia de héroes y villanos, cada uno de ellos con un único propósito en la vida y harán lo que sea por conseguirlo. Es una historia corta, más bien diríamos que es un relato, aunque no necesita de más para perturbarnos. El punto fuerte sin duda son sus personajes, no habría uno si el otro, como dos caras de una misma moneda.
El proyector se ha puesto en marcha; ya tenemos las palomitas agarradas fuertemente entre las manos, para poder disfrutar de esta película convertida en novela. En ella se nos presenta la eterna batalla entre el bien y el mal y su intento de encontrar el equilibrio. Una historia con un gran elenco de villanos, pero también algún que otro héroe, en los que el sentimiento que predomina es la ira. Es una historia entretenida, que se lee rápidamente.
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