El Espejo: Relatos de Fantasía Breve
Felipe A. Real
66 páginas aprox. (formato ebook)
Autopublicación
ISBN 9781311422248
Aquí hay historias de mundos al alcance de la mano, de realidades donde la magia es una fuerza natural pero peligrosa y de lugares donde los cuentos de hadas tienen giros inesperados… entre otras numerosas maneras de hacer Fantasía.
El espejo: Relatos de Fantasía breve es una colección de cuentos de 500 palabras o menos, escritos a partir de pies forzados, que conforman una muestra representativa del amplio abanico de la Fantasía como género literario y de los intereses particulares de su autor en ella. Todos los relatos aquí reunidos, sin excepción, apuntan a probar los límites de su creador en cuánto a técnica y concisión narrativa, además de servir de campo de experimentación para ensayar nuevas maneras de aproximarse al atractivo impulso de invocar Otro(s) Mundo(s) a través de la palabra escrita.
Este libro llegó a mis manos (electrónicas) ya que el autor es parte del colectivo Fantasía Austral, una web de larga trayectoria en nuestro país. Así, pensé que podía encontrar un trabajo con una cierta calidad y no me equivoque.
El Espejo cuenta con 22 relatos breves en torno a la fantasía. Algunos relatos son buenos o a mí al menos me gustaron (como Amante de la luna, Tres deseos, Para ti o Fiesta de cumpleaños) y algunos otros son un poco aburridos. Creo que influye en esto la extensión de los relatos, que se explica en el epílogo del libro, donde se señala que el autor escribió las historias como un desafío personal basándose en las consignas del Fantasista de Hierro, sección de Fantasía Austral y los reutilizó para este proyecto. Como opinión personal, iría que si iban a reutilizarse ¿por qué no pasaron por un proceso de reescritura y edición más exhaustivo? Con esto no digo que sean malos, si no que podría haber estudiado la extensión de las historia y modificado algunas de ellas, para que los finales no quedarán tan abruptos y nos dejaran la sensación de que estaban incompletos.
Otros detalles que observé fueron el uso de ciertas palabras en las descripciones que me pareció que no eran las más adecuadas, como llamar "gruñido" al sonido de un "mugido" de las vacas. O el hecho de describir unos ojos como "transparentes". Creo que el autor tiene un estilo propio que se nota en sus textos, pero que se le pasan ciertos detalles que joden un poco la narración. Destaco, eso sí, la hermosa ilustración de la portada que me fascinó y que buscaré cuando tenga un poco de tiempo (sí, soy una superficial).
Lo recomiendo como un libro cortito que sirve para entretener estas tardes de verano. Como es de distribución gratuita, pueden descargarlo aquí y hacerse su propia opinión de las historias.