Aunque todo parece indicar que será un día más en la plaza, cuando Nuck, el mejor herborista del reino, cierra su puesto por falta de existencias, un hombre enfurecido se abalanza sobre él. Por suerte, antes de que la sangre llegue al río, una hermosa joven que venía en busca de uno de sus remedios, le salva.
Confundiendo el amor a primera vista con los síntomas de una extraña enfermedad, Nuck elabora el ungüento que ella necesita y acude a su casa para entregárselo. Por desgracia, al volver a verla, se da cuenta de que Lidrya jamás podría enamorarse de alguien tan enclenque como él.
Sin embargo, cuando todo parece perdido, la joven le promete que se casará con él si le trae lo que más desea en este mundo, un Sirzan.
El sello del tercer cuento se ha roto y un nuevo habitante de la biblioteca aparece. ¿Os atreveréis a descubrir de quién se trata?
El herborista y el Sirzan es el tercer cuento que Rorlin descubre. Sin embargo, esta vez es ella misma quien tiene el honor de leerlo y lo hace para uno de los habitantes de la biblioteca. En esta ocasión, lo lee en los aposentos de dicho morador después de tener que huir apresuradamente del comedor**.
En él, se narra la historia de Nuck, su mejor amigo y el mejor herborista que ha conocido jamás el reino de Zoria, y su viaje para intentar encontrar un legendario pájaro: el Sirzan.
Aunque no es un personaje con un título de renombre como los protagonistas de otros cuentos, Eyra recoge su historia para complacer los deseos de esta extraña criatura.
Al contrario que en el segundo cuento, donde se desconocen cuando transcurrieron los hechos, esta historia sucede cerca del año 992 del periodo Nurgën, uno de los periodos más prolíferos del reino.
Este cuento lo escribió Eyra hace más de 290 años. Aunque no tiene tanta relevancia para la historia de Zoria como tienen otros, recoge una de las amistades más profundas que haya existido.
Si deseáis indagar más en esta insólita relación plagada de extrañas plantas y semillas de Mirdrun, tomad asiento junto al árbol y dejad que la voz de Rorlin os transporte hasta el taller de Nuck...
Bueno, ya era hora volver a recorrer los pasillos de La Gran Biblioteca de Zoria ¿verdad? Intento aguantarme las ganas de escribir todas las reseñas de esta serie para poneros un poco de variedad, ya que se que puede que no os interesen mucho estas novelas y prefiráis que os hable de otro tipo de historias y también en parte lo hago por mí para no tener que despedirme tan pronto de Zoria, pues hasta Noviembre o a saber cuando la autora no va a publicar nada.
Aunque ya os digo que aunque acabe las reseñas, que quitando esta quedan dos más, vais a leer mucho sobre Zoria y Eyra en Devoradores de mundos. Estoy preparando una semana especial para que podáis conocer mejor este mundo y a su autora... A ver si con suerte os puedo traer también algún regalito, como un concurso/sorteo o una lectura conjunta.
Y dicho esto, que se que siempre acabo hablando más de otras cosas que de el libro en sí, ¡vamos a la tercera reseña de Cuentos de Zoria!
En esta ocasión nos adentramos en el tercer cuento junto con Rorlin ¡y es el primero que la humana puede leer desde que llega a la biblioteca! Y la verdad, no puede ser uno mejor ¡es sobre la amistad entre el pájaro con más problemas - pero adorable - del universo y del herborista más bonico y con el corazón más grande que se haya conocido jamás! Con las nuevas entradas del diario de Rorlin que nos sirve de introducción y el posterior cuento que nos relata la misma, se nos introducirá y conoceremos todavía mejor a la maravillosa Mirdian y su bonita - y triste, muy triste y terrible - historia con Nuck.
No he comentado nada del libro, pero ya os voy diciendo que es mi cuento favorito y que Mirdian me ha conquistado el corazón.
Las entradas del diario y el cuento no tienen nada que ver las unas con la otra. El diario es más desenfadado y no paras de reírte con todas las ocurrencias y cambios de humor que tiene Mirdian (de verdad, junto con la señora Glíria y Drip es el mejor personaje de todos) pero en cambio el cuento es muy, MUY, duro y acabas llorando a lágrima viva y con ganas de zarandear a la autora por ser tan cruel.
De verdad, es muy mala.
Este cuento es más largo también. Después de leerme todos los cuentos puedo decir que su crueldad es proporcional al número de páginas que tienen sus cuentos.
En El herborista y el Sirzan, la historia aunque tiene que ver con el amor - pues de nuevo es el desencadenante de tooooodo lo que ocurre - pero el elemento más importante al final acaba siendo el poder de la verdadera amistad y el hacer justicia, además de que se le da mucha importancia al echo de cuidar a los animalitos y a la naturaleza; a la vida en sí. Además en este cuento Erya se centra más en los dos personajes principales, profundizando más en ellos y haciendo que conectemos mucho más con sus historias y personalidades. Debe ser por eso por lo que este cuento me ha enamorado, pues la historia me ha parecido más real y me ha emocionado mucho, mucho.
Al igual que el resto de cuentos, es muy sencillo de leer con un vocabulario muy bonito y una edición que hace que sea una autentica obra de arte. Las ilustraciones son preciosas y como en los anteriores cuentos hace que la lectura sea más vívida.
Amor, venganza, magia, amistad... Los pasillos de la Gran Biblioteca de Zoria son cada vez menos misteriosos a medida que conocemos sus habitantes, pero más misterios se nos abren al conocer sus historias y las aventuras de Rorlin ¿A que esperáis para adentraros en ella?