Reseña: El mentiroso de Mikel Santiago

En la primera escena, el protagonista despierta en una fábrica abandonada junto al cadáver de un hombre desconocido y una piedra con restos de sangre. Cuando huye, decide tratar de reconstruir él mismo los hechos. Sin embargo, tiene un problema: no recuerda apenas nada de lo ocurrido en las últimas cuarenta y ocho horas. Y lo poco que sí sabe es mejor no contárselo a nadie.

Mi Opinión:

“El mentiroso” es la primera novela que leo del autor Mikel Santiago, un autor vasco ya consagrado en este género.  Me llamo muchísimo la atención esta novela principalmente por el título y porque transcurre en un pueblo costero de Vizcaya, por lo que pensé que la naturaleza tan bella y al a vez peligrosa de esta comunidad autónoma iba a tener mucho que ver en la trama y ser un personaje más.

La historia comienza cuando el protagonista se despierta en una fábrica desolada en mitad de la noche al lado de un hombre muerto sin recordar exactamente porque llego allí. Alex tiene amnesia y tal y como se dice en la sinopsis lo que recuerda es mejor no contárselo a nadie. Esta premisa en si es muy interesante, creo que tiene mucho potencial pero desgraciadamente creo que el autor no la explota demasiado bien. Existen momentos en los que la trama y la resolución de algunos puntos de la misma resulta inverosímil, poco creíble y algo incoherente.

El autor a través del personaje principal nos traslada a los secretos, mentiras, cotilleos y vicisitudes de este pequeño pueblo costero donde todo el mundo se conoce. Alex decide guardar silencio sobre lo que recuerda e investigar por si mismo el asesinato de este desconocido. Vemos como analiza sus propios pasos para entender porque estaban ambos en esa fábrica, que fueron a hacer allí y porque tuvo lugar ese trágico desenlace.

Alex es un personaje que creo que tiene poco sentido común y pocas luces, sus actitudes son las que me han resultado inverosímiles en muchos aspectos, ya que hace cosas que resultan un tanto retorcidas.  Esta claro que en un pueblo pequeño en el que todo el mundo se conoce, todo el mundo saber los secretos de los demás, es un escenario más que interesante para ambientar un asesinato, donde dichos secretos familiares no deben salir a la luz. Bajo mi punto de vista, esta parte de la trama es la que más juego da y de la que me hubiera gustado ver un mayor desarrollo. Alex no es el único que investiga el caso, también lo investiga la policía ya que el fallecido es un escritor que se hizo famoso por sacar los trapos sucios del pueblo en una novela con la que se hizo bastante rico. Por tanto lo que trata Alex es de encontrar respuesta antes de que la policía lo incrimine.

El resto de personajes de la novela me parecen poco atractivos, poco profundos y que tampoco tienen nada reseñable que comentar. Otro aspecto a tener en cuenta es el tema de la naturaleza como un personaje más. El pueblo costero donde el autor ambienta la novela, esta marcado por sinuosas carreteras al borde de acantilados y casas con muros resquebrajados por las noches de tormenta. Es un ambiente hermoso por el día pero puede ser un ambiente bastante peligroso de noche. Me hubiera gustado que este paisaje tuviera más protagonismo en la trama y no fuera únicamente anecdótico. Quizás mis expectativas a este respecto se debiera a que había leído otro thriller ambientado en el País Vasco donde el paisaje era otro personaje más que contribuía a crear un ambiente angustioso y bastante oprimido para los personajes. Por lo que creo que a veces las comparaciones son odiosas.

En conjunto ha sido un thriller muy entretenido, al que creo que le faltan un par de cosas para ser redondo. Es una lectura entretenida, se lee bastante rápido y con mucho interés porque el autor sabe mantener la atención del lector. He  disfrutado de la novela, que a penas me ha durado un par de días, la pluma y estilo del autor me han gustado así que creo que probaré con otras novelas del autor.

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