De nuevo una novela que aunque esté enfocada al público juvenil no tiene edad para ser leída, porque la vida, y los retos que ésta nos plantea, forma parte intrínseca del devenir de todo ser humano.
Es una novela que nos habla de la fuerza de la amistad, de la persecución de los sueños y de luchar por ellos, de aceptar la enfermedad y de afrontar la muerte como parte indisoluble de la vida.
Charis y Frankie, dos niñas a las puertas de la pubertad, pertenecen a dos mundos diferentes, y ni en sueños hubieran imaginado que algún día podrían ser amigas y compartir secretos e ilusiones, pera la vida en toda su inteligencia, tenía escrito en el destino de ambas que sus caminos iban a cruzarse y que su relación iba a ser una experiencia vital para ambas.
Nadie en el pueblo conoce la amistad entre las dos niñas, ni tan siquiera sus familias, ellas lo mantienen oculto para evitar que nadie pueda poner trabas a su relación, pero cuando a Frankie le diagnostican un cáncer el secreto acabará por salir a la luz y Charis acabará convirtiéndose en alguien fundamental en su enfermedad.
Charis tendrá que superar sus propios miedos para ayudar a su amiga a afrontar el suyo a la muerte, y además colaborará para que Frankie vea cumplido su sueño secreto de volar.
Una novela de lectura tranquila y tierna, en ocasiones dramática y en otras, divertida, pero sin grandes dosis de tristeza ya que el mensaje que intenta trasmitir es el del amor a la vida y a la persecución por encima de todo de los sueños. Enviar por correo electrónicoEscribe un blogCompartir con TwitterCompartir con Facebook
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