Autor: Paula Hawkins
Editorial: Planeta
Número de páginas: 560
Pocos días antes de morir, Nel Abbott estuvo llamando a su hermana, pero Jules no cogió el teléfono, ignoró sus súplicas de ayuda. Ahora Nel está muerta. Dicen que saltó al río. Y Jules se ve arrastrada al pequeño pueblo de los veranos de su infancia, un lugar del que creía haber escapado, para cuidar de la adolescente que su hermana deja atrás. Pero Jules tiene miedo. Mucho miedo. Miedo al agua, miedo de sus recuerdos enterrados largo tiempo atrás, y miedo, sobre todo, de su certeza de que Nel nunca habría saltado…No te fíes nunca de una superficie en calma, no sabes lo que puede haber debajo.
Lo que más me llamó la atención a leerlo fue el hecho de que sea escrito por Paula Hawkins, si no la conocéis, la autora de La chica del Tren. Este último había sido un libro que si ben me había gustado, no me había encantado, ya puede ser por las altas expectativas con las que lo cogí. No obstante este despertó mi curiosidad.
La trama del libro se centra en la muerte de Nel Abbott, una mujer que muere al caer de un acantilado, o al ser tirada, no se sabe. Su hermana tendrá que mudarse a la ciudad de la que había huído para hacerse cargo de la hija de la fallecida e identificar el cadáver. Jules descubrirá cosas sobre la muerte de su hermana, alguna de las cuales la va a hacer pensar. Además una adolescente también muere en la misma circunstancia lo que levanta sospechas, ¿estarán ambas muertes conectadas?. Lo que en un principio parece ser un suicidio, muestra señales de que podría tratarse de un asesinato. ¿Fue un suicidio, un asesinato o un accidente?
Si esperáis encontraros a un libro como La Chica del Tren, no es así. Tiene un argumento distinto, unos puntos de vista distintos y bastantes más personajes.
Una de las cosas que me sorprendió del libro es la gran cantidad de puntos de vista que hay, sobre 8 o 9, por lo que al principio puede resultar un poco confusa la lectura. Hay muchos personajes y en algún momento puede ser necesaria una pausa para asentar las ideas en la cabeza y no hacerse un lío.Al principio el libro me resultó algo confuso y empezó a gustarme más pasados los primeros capítulos, cuando cesa la aparición de personajes nuevos y se empieza a desarrollar la acción. Todas las supersticiones y leyendas en torno al río ayudan a crear un ambiente sombrío y oscuro. En la segunda mitad se incrementa la curiosidad por ver como terminará todo y que pudo haber pasado.
Eché en falta más suspense del que abundaba en su primera obra, ya que la trama se pudo haber explotado más. Me faltó empatizar con algunos personajes y al final me he quedado con algunas preguntas sin respuesta.
No cabe duda de la perfección narrativa de la autora, escribe de una forma muy bonita y emplea con maestría las metáforas y lo simbólico. Y aunque es un libro que merece la pena leer por saber como se va a resolver todo me faltó algo, no me enganché totalmente al libro.En definitiva, un libro que me ha gustado, con un inicio un poco lento y que me pudo haber gustado más si se hubiese explotado más el misterio y la intriga.
¿Os lo habéis leído? ¿Qué os ha parecido? ¿Tenéis pensado leeroslo? * Muchas gracias a Planeta por el envío del ejemplar.