Reseña: Flores para mi tumba

Cuando todo cambia en un sólo segundo.Cuando una vida adolescente es sesgada.Cuando la locura es la única explicación racional a lo que sucede a tu alrededor.Cuando te obligan a dejar atrás todo lo que conoces.Cuando tu destino está escrito.Cuando tu mayor enemigo es el único que puede ayudarte.Cuando un corazón muerto vuelve a latir...
Cuando la muerte es sólo el principio de tu vida.

Este libro llegó a mis manos por casualidad. Nunca había oído hablar de él ni de su autora, y cuando vi que era autopublicado me sorprendí bastante, sobretodo después de leerlo. Sinceramente no sabía de qué iba exactamente, pues la sinopsis te deja con ganas de leer pero no te prepara exactamente para las páginas siguientes. ¿Hay vida después de la muerte? Esta es una alternativa que nos presenta la autora, y que a mí personalmente me parece de lo más interesante. Lejos de hablar de vampiros, híbridos, ángeles caídos... Nos habla sencillamente de eso, de una vida después de la muerte. Vivir sin estar vivo realmente, amar sin tener realmente un corazón latiendo por ello. La historia se va intercalando entre la acción actual de los protagonistas (Sandra y Jairo) y cómo llegan a esa situación. Es decir, cómo murieron y cómo eran sus vidas antes de ese duro golpe. Me resulta interesante este tipo de narración, porque a mí en particular me engancha y hace que no suelte el libro (Y que me gane una buena bronca de mi madre, pero eso es otra historia). Te pasas todo el libro deseando llegar a ese punto de inflexión en el que pasa todo, en el que descubres porqué Jairo es tan bipolar y Sandra se da cuenta de lo terca que es... En el que se descubren los sentimientos de ambos, pero luego llegas al final... Y deja mucho que desear.

No malinterpretarme, el libro me ha gustado, pero el final me ha resultado demasiado rápido e insuficiente. Es decir ¿te pasas todo el libro deseando llegar a ese punto y lo dejas así? ¿Tan rápido? Creo que podría haber alargado el final un par de capítulos y darles un final no tan, digamos, precipitado. Vamos, ¿qué tienen los escritores con dejarme a medias en los finales? ¿¡Me odian a caso!? No es la primera vez que me pasa y últimamente me ocurre con demasiados libros. No me quejo de los finales abiertos, SÍ de los precipitados. Me pasó con Requiem (Ya os puse mi opinión en la reseña de la trilogía) y me ha pasado con otros tantos que no voy a mencionar. Ya no sé si este problema con los finales es mío por no querer acabar un libro o que de verdad los escritores quieren quitarse el muerto de encima y dejar el libro a la birulé. ¡Que me voy del tema!

En general, un buen libro que se lee rápido y engancha desde la primera página, básicamente, porque no sabes qué esperar. La relación entre los dos protagonistas es entretenida y bastante divertida, sobretodo porque se pasan la mitad del tiempo fastidiándose el uno al otro. Aunque confieso que en alguna que otra ocasión he queridos meterles un mamporro. Mi único 'pero', el final.
Nota: 9/10

Hooooooooooooola, hola. María Madrid al aparato.
Antes que nada... ¡¡Feliz cumpleaños María!! Aunque fue hace tres días, quería dedicarte una pequeña felicitación por aquí.
¿Qué tal vuestro verano? ¿Estáis leyendo mucho?
Sé que la reseña es corta, pero si me pongo a decir cosas la lleno de spoilers y no es plan.
¿Habéis leído el libro? ¿Os ha gustado? ¿Creéis en la vida después de la muerte?
Hasta la próxima lectores gatunos :)